“Es un desastre absoluto, no hay por donde empezar a limpiar”

ELIZONDO - El impresionante restaurante Santxotena se despertó ayer como una zona catastrófica. Ubicado justo en el lugar donde el río Baztan gira a la derecha hacia la presa, el agua vino tan desbordada del cauce que se salió dejando Santxotena, la trasera del Ayuntamiento y el parking que normalmente utilizan los vecinos de la zona como una auténtica piscina. En el edificio en el que se ubica el establecimiento hostelero, donde la familia Santxotena además reside en las plantas superiores, se habían inundado todas y cada una de las salas que componen el restaurante. “El comedor que tenemos para 120 comensales y otro comedor que tenemos en la cocina para 30 personas más también está echado a perder. El agua nos ha movido todos los armarios, nos hemos quedado sin mobiliario, sin vajillas, sin cámaras, no hay por donde empezar a limpiar”, comentaba Teresa Santxotena, que todavía no se atrevía ni a mirar en el interior de las cámaras los alimentos que guardaba dispuestos para servir bien de comidas durante el fin de semana. “Hay agua hasta en el almacén y lo peor es la impotencia que se te queda, porque nosotros vivimos en la primera planta y hemos visto cómo se venía encima todo el río. Llevamos 30 años con el restaurante y esto es un horror, un desastre absoluto”, narraba Teresa. - E.C.