Muere un camionero en Erice de Iza al tratar de evitar un choque

erice de iza - Un escalofriante accidente ayer a las 16.33 horas en Erice de Iza (carretera N-240-A Pamplona-Irurtzun) dejó un trágico escenario, con un camionero fallecido cuando intentaba evitar la colisión con otro camión ligero, tipo furgoneta, que circulaba en sentido contrario y que previamente había invadido el carril por el que circulaba el tráiler.

Al golpear de manera frontolateral las dos cabeceras de los camiones, el de mayor tonelaje, conducido por el vecino de Berriozar Mor Fall Diop, de 40 años y de origen senegalés, aunque tenía nacionalidad española, trató de esquivar el golpe, se lanzó hacia el lado derecho de la calzada y perdió el control del vehículo. Ahí, el conductor fallecido poco pudo hacer ya que su camión hizo la tijera, golpeó contra la bionda, cruzó al carril contrario y finalmente terminó volcado y cayendo por un talud. La escena en el lugar era dantesca. Por fortuna, el joven que conducía el camión ligero, E.O., de 22 años y vecino de la Cendea de Olza, no sufrió daños físicos y sí presentaba un shock emocional que requirió atención médica y psicológica por el impacto del suceso.

Este joven, que conducía una furgoneta de la empresa para la que trabaja en Mutilva, realizaba un viaje con destino a Alsasua para repartir material eléctrico. La carga que transportaba quedó desperdigada por la calzada e incluso, con parte de su carrocería dañada, provocó daños en otros tres vehículos que circulaban detrás de él. El fallecido conducía en sentido contrario, hacia Pamplona, y llevaba en su gabarra palés de madera con cajas y el toldo del remolque respondía a una empresa de Uharte Arakil que se dedica a boninados de plástico y a la que realizaba los portes otra firma. Los otros vehículos implicados en el accidente fueron tres turismos: un Toyota Landcruiser, con daños en el capó y en los bajos; un Peugeot 407 con un importante impacto en la luna y faros delanteros, y un Chevrolet que finalmente apenas recibió algún rasguño del material que salió volando por la carretera. El que sí necesitó también atención sanitaria y por ello fue trasladado al Complejo Hospitalario de Navarra fue el conductor del Peugeot 407, aunque sus heridas eran en principio de pronóstico leve y se trataba sobre todo de cortes por la rotura de cristales.

El suceso fue atendido por Policía Foral, cuyo equipo de Atestados de Pamplona se encarga de la investigación. Hasta el lugar se desplazaron servicios médicos como ambulancia medicalizada, bomberos que procedieron a desatrapar el cuerpo del fallecido y patrullas que se encargaron de regular el tráfico. Además, una grúa se encargó de retirar el camión por lo que la carretera permaneció ocho horas cortada.

“Nos hemos salvado de milagro”

“Pasé por medio”. En un Chevrolet, en tercer lugar detrás de la furgoneta que invadió el carril, circulaba Francisco, vecino de San Sebastián, que se dirigía precisamente a su domicilio en compañía de su hija. El donostiarra apenas se percató de cómo había ocurrido el suceso aunque sí que podía dar fe de la enorme fortuna que tuvieron a posteriori de no sufrir ninguna colisión con alguno de los accidentados o con la mercancía que había quedado desperdigada por la carretera. “No hemos apreciado muy bien cómo ocurrió la colisión, pero lo que hemos visto era una nube de cosas que volaban de un lado a otro y casi hemos dejado de percibir la carretera. Yo he visto que los dos coches de delante han frenado y lo que he hecho ha sido pasar por medio entre los dos camiones y todo el material que había esparcido. Al menos no hemos sufrido ningún daño, pero desde luego que todos los que estamos cerca lo podemos contar de milagro”.