pamplona - Durante la infancia, los niños cometen errores alimentarios que pueden agravarse durante la adolescencia, según un estudio de Eroski Consumer sobre los hábitos alimentarios de los niños entre 2 y 18 años. Para realizar dicho estudio, la empresa preguntó a un total de 1.050 adultos de 9 comunidades autónomas -Andalucía, Islas Baleares, Castilla-La Mancha, Catalunya, Comunidad Valenciana, Galicia, Comunidad de Madrid, Navarra y País Vasco-, entre los cuales 135 eran navarros. Entre los problemas más graves en Navarra, destaca que el 31% de los jóvenes de entre 13 y 18 años por los que se consultó no consume frutas a diario y el 17% ve la televisión cuando come.

Aunque nueve de cada 10 personas consultadas en la Comunidad Foral consideran que sus hijos tienen unos hábitos nutricionales equilibrados, la realidad es diferente. Por eso, Eroski Consumer decidió realizar este estudio entre los meses de septiembre y octubre, donde se preguntó a cada entrevistado navarro por los hábitos nutricionales específicos de uno de los menores o adolescentes que hubiera en casa. En la encuesta realizada por la entidad, se constató que los menores de edad sí cometen errores a la hora de comer.

Entre los menores y jóvenes navarros por los que se consultó, el 50% no incluyen la fruta en el desayuno y el 61% toman cereales azucarados o chocolateados. Además, otro error muy típico se refleja en que el 51% no come verduras ni hortalizas a diario y otro 25% tampoco fruta. Por contra, el 10% de estos jóvenes y niños toma dulces todos los días y el 9% bebe refrescos. Además, un 13% de los menores por los que se preguntó siempre ve la televisión durante las horas de comida.

Algunos de estos malos hábitos, que comienzan desde la infancia, se agravan en la adolescencia. Un ejemplo de esto es que mientras el 33% de los niños de 7 a 12 años por los que se consultó no incluye fruta en el desayuno, entre los jóvenes de 13 a 18 años esta proporción aumenta al 60%. Por regla general, la fruta no la consumen a diario el 31% de los adolescentes, mientras que el porcentaje entre los niños de 7 a 12 años es del 20%.

Por último, los menores con edades comprendidas entre 13 y 18 años son más aficionados a ver la televisión mientras comen. De el total, un 17% lo hace siempre, mientras que entre los pequeños de 2 a 12 años este porcentaje es del 10%.

planificar para regular Por otro lado, los cuidadores (progenitores, abuelos o con otro parentesco familiar) tampoco siguen algunas rutinas diarias de especial importancia para conseguir que el niño interiorice unos hábitos alimentarios correctos que le permitan desarrollarse y tener una salud fuerte.

En primer lugar, un 55% de las personas navarras consultadas no planifican los menús de los niños y el 4% tampoco suele establecer un horario regular para las comidas. En segundo lugar, el 20% no come a diario con los niños y, cuando comen juntos, un 22% utiliza la comida como incentivo (premio o castigo). Por último, el 70% suele tener en casa bollería industrial, gominolas, snacks y alimentos similares que pueden tentar a los menores.

A cuatro de cada cinco adultos encuestados en Navarra por Eroski Consumer les preocupa mucho o bastante la obesidad y el sobrepeso infantil. De hecho, consideran que los factores que más influyen a la hora de que un niño sufra un exceso de peso son los hábitos familiares. Es más, nueve de cada diez encuestados navarros considera que tener sobrepeso durante la etapa infantil influye después en la salud cuando el niño se convierte en adulto. - A.R./Agencias

Ni frutas ni verduras. El estudio refleja que el 51% de los jóvenes navarros no come verduras ni hortalizas a diario y otro 25% tampoco fruta. Por contra, el 10% de estos toma dulces todos los días y el 9% bebe refrescos.