PAMPLONA. En el juicio, el Ministerio Fiscal elevó a definitivas sus conclusiones provisionales y pidió un año de prisión por cada uno de los delitos de allanamiento, así como ocho días de localización por cada una de las faltas, mientras que la defensa solicitó la libre absolución de su patrocinado.

En su resolución, la Sección Primera de la Audiencia considera, de conformidad con el veredicto del jurado, que no ha quedado probado que el acusado, de 34 años, entrara sobre las 22:00 horas del 31 de mayo de 2013 y sobre las 21:00 horas del 2 de junio de 2013 en un domicilio de la calle Mayor de Pamplona.

Tampoco ve acreditado que el acusado golpeara la puerta, causando daños en la misma, ni que cogiera la cartera del interior.

El tribunal sostiene en su sentencia, que puede ser recurrida, que los motivos expuestos por los jurados para llegar a la conclusión de no culpabilidad constituyeron "un razonamiento plenamente fundado" y debe llevar por ello a dictar un pronunciamiento absolutorio.