zaragoza - Un hombre y una mujer aparecieron ayer muertos de forma violenta en un establecimiento hostelero en el barrio de Miralbueno de Zaragoza, en un nuevo caso de violencia machista. La mujer, Soraya G.S., tenía 37 años y un hijo de 5, y presuntamente fue asesinada, con un arma de fuego, por su expareja sentimental, M.R.M.P., de 41 años, que luego se suicidó. Ella le había denunciado por amenazas de muerte y el supuesto autor del crimen tenía una orden de alejamiento de riesgo “mínimo” al estimar el juez que no se daban las condiciones para brindar a la mujer protección personal.
Los cadáveres de la pareja, ambos de nacionalidad española, fueron encontrados a primeras horas de la mañana de ayer en el interior del bar Planet, donde la mujer trabajaba como camarera. Fue un cliente el que avisó a la propietaria al ver la persiana del establecimiento a medio bajar.
Algunos familiares de la víctima relataron ayer a los medios de comunicación que en varias ocasiones habían advertido de que el presunto autor de los disparos tenía una pistola. El delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, informó de que la mujer “tenía una orden de protección que consistía en una orden de alejamiento, con un nivel de riesgo no apreciado, dado que el exnovio vivía a una distancia de más de 400 kilómetros, concretamente en Medina del Campo (Valladolid). La orden de alejamiento consistía en una distancia de más de 500 metros”.
El pasado 5 de febrero, al regresar a casa, la víctima se encontró dentro al hombre, que le habría amenazado en presencia de su hijo. “Voy a llevar a tu madre a un viaje muy largo del que no va a volver”, le dijo al niño mientras enseñaba una pistola. Soraya denunció esos hechos a la Policía Nacional , que procedió a detener al hombre, que pasó a disposición judicial pero, según indicó el delegado del Gobierno, al no haber antecedentes previos fue puesto en libertad, y se le impuso la orden de alejamiento.
En los días transcurridos desde la denuncia, la Policía no había recibido ninguna notificación que alertara de algún riesgo. Según el protocolo, a la mujer se le había asignado un policía de referencia para que, ante cualquier anomalía que se detectase, fuera avisado.
Una vecina afirmó en declaraciones a los periodistas que fue la dueña del bar la que se encontró los cuerpos cuando fue a este establecimiento, que abre a las siete y media de la mañana, según esta vecina.
luto El Ayuntamiento de Zaragoza decretó para ayer, desde las dos de la tarde, un día de luto por el fallecimiento de la mujer asesinada presuntamente asesinada por su expareja. Además, el Ayuntamiento convocó para hoy una concentración de repulsa a las puertas de la Casa Consistorial.
Así lo señaló el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, tras recibir a la actriz Luisa Gabasa con motivo de su reciente Goya en los Premios de la Academia, quien también aprovechó para expresar su solidaridad “como mujer” con esta nueva víctima presuntamente de la violencia machista.
El alcalde anunció su intención de poner en marcha una colaboración entre el cuerpo municipal de Policía y el Cuerpo Superior. - Efe/D.N.
Amenaza. El pasado 5 de febrero, Soraya G.S. volvió a casa y se encontró dentro a su expareja, que le habría amenazado en presencia de su hijo. “Voy a llevar a tu madre a un viaje muy largo del que no va a volver”, le dijo al niño mientras enseñaba una pistola.
Denuncia. La mujer asesinadadenunció esos hechos a la Policía Nacional, que procedió a detenerlo, pero al no haber antecedentes previos fue puesto en libertad, y se le impuso la orden de alejamiento.
Protocolo, al olvido. Tras la denuncia, la Policía no recibió notificaciones que alertaran de riesgo. Según el protocolo, a la mujer se le había asignado un policía de referencia para que, ante cualquier anomalía, fuera avisado.