como cada Nochevieja, tras las doce campanadas que dan comienzo a un nuevo año, los pamploneses y pamplonesas acudieron a su primera cita del 2018. A partir de la medianoche, cientos de personas, vestidas con sus mejores galas, se dirigieron al centro de la ciudad que, una vez más, volvió a llenarse de un sinfín de disfraces para dar comienzo al nuevo año de la forma más original, convertida ya en toda una costumbre.
En esta noche tan especial y atípica existen varios tipos de cuadrillas: las que deciden disfrazarse todos de la misma temática, o los que, por el contrario, van cada uno a su gusto. Los que dedican tiempo y ganas a su disfraz o aquellos que dejan todo para última hora. Aunque es cierto que ninguno pasa desapercibido y todos tienen su mérito.
Esta vez, como si de una película o serie se tratase, el corazón de la ciudad se convirtió en el escenario perfecto para recopilar todo aquello que nos ha marcado durante el 2017 que, en esta ocasión, tuvo como grandes protagonistas, sin ninguna duda, los personajes de las series Juego de Tronos, Vikingos y La casa de papel.
Aunque los disfraces más clásicos como los piratas, payasos, animales, superhéroes, bomberos o policías tampoco faltaron a la cita.
En el caso de Asier Guerrero y su cuadrilla decidieron homenajear a la serie del momento: La casa de papel. “Todos los años buscamos algo que nos guste y que sea un poco distinto a los demás disfraces que se suelen repetir todos los años. Por ello, esta vez pensamos que la mejor idea era ir de nuestra serie favorita”.
A pesar de que en esta ocasión uno de los personajes más reclamados en las tiendas fueron los de la saga de Star Wars, el lado oscuro de la Fuerza no triunfó. Sin embargo, quienes sí se dejaron ver paseando entre la multitud fueron los personajes de Juego de Tronos como Daenerys, Jon Nieve o Cara Perro, encarnados por Cristina, Mikel Úriz, Imanol Calvo, Jon Ros y Lidia Martín.
“En nuestro grupo de amigos normalmente solemos ir disfrazados cada uno de una manera diferente, pero esta vez Juego de Tronos nos ha unido y hemos conseguido ponernos de acuerdo”, comentó Cristina con una sonrisa.
Como todos los años, la originalidad y la creatividad son los grandes retos de los disfraces que se lucen en Nochevieja. Por ello, muchos dedican tiempo y ganas para no pasar desapercibidos y lograr captar todas las miradas.
En este sentido, el ingeniero Daniel Calvo se convirtió en uno de los grandes protagonistas de la noche con su traje de luces de led y su peculiar paso de baile que sedujo a cientos de curiosos.
“Hace unas semanas estaba en mi casa viendo un vídeo en Internet y vi un chico con este atuendo y decidí imitarle ya que me pareció llamativo y original”, comentó Calvo.
un San Fermín en Nochevieja Tampoco les faltó originalidad a Carlos Jiménez y a su amigos, que recorrieron la plaza del Castillo simulando la procesión de San Fermín con Alaiz Ruiz como santo.
Entre el bullicio, su amiga Neferet Díaz, comentó entre risas y algo avergonzada por el escándalo que habían organizado sus amigos, que “son unos aficionados a las fiestas de San Fermín” pero que nunca se habían planteado encarnar al santo que tanto admiran. “Creo que es su mejor disfraz”, añadió Neferet.
La cuadrilla de Iker Pimoulier, Iñaki Perujo y Gorka Alonso aterrizó en el Casco Antiguo de una forma un tanto peculiar.
Los tres amigos decidieron ataviarse en un llamativo traje de paracaidista, que no pasó inadvertido.
“No nos gustan los disfraces sencillos, nosotros preferimos que sea diferente, original y sobre todo que llame la atención”, señalaron. Aunque es cierto que después, para entrar a los bares y continuar con la fiesta parte del disfraz “irá a la basura”, concluyeron.
Hubo también quien convirtió parte de la plaza del Castillo en una pista de curling. Con una lona blanca de grandes dimensiones, Martín Sáez y el resto de sus amigos comenzaron a jugar y a hacer partícipes a las cuadrillas que se encontraban alrededor.
“Al principio no nos poníamos de acuerdo para elegir el disfraz pero lo único que teníamos claro era que queríamos pasar un buen rato todos juntos y hacer participar a la gente con nuestro original disfraz”, señaló Sáez. El joven añadió que a simple vista parece un trabajo sencillo pero que, por el contrario, requiere muchas horas para preparar todo bien.
La actualidad también se coló en las calles del Casco Antiguo por lo que no fue difícil encontrarse con Puigdemont o con el mismísimo Donald Trump.
Conchita Martínez y Carolina Melero también quisieron hacer un guiño a las últimas novedades sociales y, por ello, su disfraz estuvo inspirado en la lista negra de paraísos fiscales. Las dos chicas se colocaron algunos billetes falsos, unos flotadores y el símbolo del dólar y salieron a disfrutar de la noche. “La organización ha sido un poco complicada ya que en un principio no sabíamos como plasmar la idea pero gracias a nuestras madres ha quedado mucho mejor de lo que pensábamos”, comentaron Martínez y Melero.
