“El fisioterapeuta, en otros países, es parte del equipo de Salud Mental”

Bilbao - La fisioterapia en salud mental es una especialidad de la fisioterapia que abarca un amplio número de técnicas dirigidas directamente a mejorar los trastornos mentales y psicosomáticos, así como trastornos musculoesqueléticos de larga duración y dolor crónico. A pesar de que esta disciplina tiene una larga trayectoria en países de Europa, Estados Unidos, Canadá o Australia, no está suficientemente implantada en el Estado. Es por ello que el Colegio Oficial de Fisioterapeutas del País Vasco (COFPV) ha puesto este año el foco en “visibilizar la evidencia científica que avala la eficacia y efectividad del ejercicio terapéutico en el abordaje de los diferentes trastornos que afectan a la salud mental de la población”, como es el caso de la depresión, los trastornos de alimentación o la esquizofrenia. Y precisamente para dar a conocer estas terapias, el COFPV organizó hace unos días la charla Fisioterapia y salud mental, impartida por la experta Maite Cenoz.

La fisioterapia en salud mental no es nueva, ¿en qué países hay más tradición?

-Hay mucha tradición en países escandinavos, allí se desarrolló bien en los años 70 y en el caso de algunas técnicas ya hay cinco tesis doctorales que las avalan. Todo depende un poco de qué enfoque le quieras dar, qué paciente tengas, qué patología tengas presente... Por ejemplo, la terapia psicomotora se estudia, pero está solo en noruego. Sin embargo, la terapia de conciencia corporal basal la han hecho en inglés, es mucho más accesible y es la terapia más extendida.

¿En qué consiste?

-Es una técnica basada en la calidad del movimiento; cuando el equilibrio, la respiración y la concienciación están integradas, el movimiento es fluido, es armónico, es acorde a la energía física que pones. Sobre todo, estas técnicas trabajan con la actividad física adaptada a la patología mental y, además, la conciencia corporal. La terapia de conciencia corporal utiliza la conciencia corporal como instrumento para que la persona se desarrolle y armonice su movimiento.

¿Se puede aplicar para todas las patología mentales?

-Actualmente, hay estudios hechos para algunas patologías, las que tenemos confirmadas son la depresión, la fibromialgia, el dolor crónico, colon irritable, esquizofrenia, y luego por ejemplo para los músicos, para la postura corporal, también.

¿Cómo se aplica, por ejemplo, en los casos de depresión?

-Como dato, una de cada cuatro personas está en riesgo de sufrir una patología mental, sin embargo, la lumbalgia, una de cada diez, y de hecho las lumbalgias son las causas más comunes de baja. En el caso de la depresión, cuando evaluamos, vemos un patrón de cierre. Si hablamos de mucha ansiedad, que colapsa completamente y cae en depresión, al principio veremos mucha tensión, sobre todo en la parte de atrás. Lo esencial es que la persona pueda manejar el estrés del día a día, que pueda trabajar fructíferamente y que se pueda socializar con normalidad; para ello es bueno conocer unos trucos de manejo del estrés. Caminar a 120 de pulsación a cardio durante 45 minutos se ha visto que es antidepresivo. La OMS ha dicho que el deporte es antidepresivo. Hay un listado de cosas que puedes hacer, sería interesante que cada uno tuviera sus trucos.

Es decir, no se trata solo de abordar las consecuencias físicas que acarrean las enfermedades mentales.

-Actualmente, solamente se están tratando las dolencias físicas, pero a nivel emocional, desde el movimiento, también incidimos. El fisioterapeuta está capacitado para trabajar en los equipos de salud mental para tratar la patología mental desde el movimiento. En otros países, el fisioterapeuta es parte del equipo de psiquiatría y salud mental.

¿Es la demanda que hacen?

-Más que demanda, es una invitación. Así se aprovechan los recursos que tenemos. Lo que pasa es que se tiene que conocer, porque es muy desconocido. Por ejemplo, quizá veamos unas lumbalgias que son recurrentes, que no se van, quizá hay una tensión emocional que le ha creado un jirón a nivel fascial y entonces no se suelta porque está contenido, pero si le enseñas a trabajar desde la conciencia corporal, es capaz de liberarlo. Se puede hacer prevención, tratamiento y mantenimiento. Estas tres áreas son básicas, incluso a una persona sana que esté en un trabajo exigente le vendría bien.

Así que sería beneficioso si lo incorporáramos a nuestro día a día, ¿no?

-En algunas universidades, para los estudiantes mismos, se hacen talleres de conciencia corporal como una optativa. Aquí, en la universidad, los fisioterapeutas no la tenemos. En otros países está en el currículum de la fisioterapia de base. Los pacientes se beneficiarían muchísimo, porque, por ejemplo, les dan muchas pastillas y está genial, pero la fisioterapia también ayuda, puedes prevenir cardiopatías, puedes prevenir obesidad, puedes prevenir muchas cosas haciendo una buena pauta de cinesiterapia -utilización terapéutica del movimiento-. Tienes que conocer el movimiento de la persona cuando está deprimida, con una esquizofrenia, con cualquier patología mental, para saber qué necesita desde ese movimiento para recuperar su salud.

¿Cuántos fisioterapeutas en salud mental hay en el Estado?

-En la asociación, participando y colaborando, trece; pero en la familia somos más, 19. Ahora se está formando a más terapeutas en Almería y hay un máster que va a comenzar el próximo enero.