Cae un grupo acusado de robar en ventas de Dantxarinea e Ibardin

PAMPLONA - Con la detención de seis personas, cinco de las cuales han ingresado en prisión, la Guardia Civil de Navarra da por desarticulado un grupo criminal que había cometido hasta once robos con fuerza en diversas provincias, entre ellas Navarra -donde se les acusa de siete asaltos a ventas situadas en Dantxarinea e Ibardin-, Madrid, Huesca y Toledo. Se calcula que el perjuicio económico a las víctimas de los robos investigados rondaría los 800.000 euros, a lo que habría que sumar los daños producidos en los diversos establecimientos violentados, que estaría en torno a los 200.000 euros.

Las investigaciones de la operación Dantxaria se iniciaron a raíz de tener conocimiento de la comisión de varios robos cometidos en la Comunidad Foral, concretamente en las ventas localizadas en la frontera con Francia, en Dantxarinea e Ibardin. En estos robos, llevados a cabo durante los primeros meses del 2018 en establecimientos comerciales (estancos y joyerías), los autores lograron apropiarse de un suculento botín en forma de mercancías (tabaco y joyas), las cuales eran puestas a la venta posteriormente en el mercado negro.

La Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Navarra asumió la práctica de las gestiones encaminadas a la identificación de los autores, debido a la especialización de esta unidad en investigaciones de este tipo, y los agentes lograron determinar la forma de actuar durante los robos, siendo muy similar en todos ellos, utilizando un “punto oscuro” en los sistemas de alarmas de los que disponían los establecimientos, lo que hacía que las alarmas no se dispararan y pudieran actuar sin ser descubiertos.

profesionales e itinerantes Este hecho, unido a la utilización de dispositivos electrónicos, vehículos lanzaderas y de vigilancia y sistemas de comunicaciones, todo ello encaminado a eludir la acción de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, hicieron pensar a los investigadores sobre la profesionalización de los autores, los cuales se dedicaban a realizar los robos de manera itinerante. A medida que avanzaron las investigaciones se fue estrechando el cerco sobre los autores, al igual que se iban detectando otros robos cometidos en otras comunidades.

El estudio y el análisis de las comunicaciones obtenidas a partir de las intervenciones telefónicas permitieron evidenciar que formaban un grupo criminal formado por dos células, una de ellas asentada en la localidad madrileña de Valdemoro y la otra en Rumanía (de donde eran originarios). Los implicados residentes en Rumanía se desplazaban a España con el único objeto de llevar a cabo las acciones delictivas, y abandonaban el país inmediatamente después de cometer los hechos.

Tres registros domiciliarios. Durante la operación se realizaron tres registros domiciliarios en diversas provincias (Girona, Toledo y en Madrid), en los que se detuvo a seis personas y se investiga a una séptima.

Efectos intervenidos. En los registros llevados a cabo se intervino un vehículo, varios terminales móviles, numerosas tarjetas de telefonía, así como efectos sustraídos en los robos (televisores, un ordenador, cámaras fotográficas, relojes, oro, etc.).

Intentaban huir. La detención de dos de los implicados se realizó en el momento que éstos intentaban huir del Estado para evitar la acción de la justicia.

Órdenes europeas de detención. El Juzgado instructor ha interpuesto tres Órdenes Europeas de Detención y Entrega contra los autores de los hechos que no han podido ser localizados en España.

Falsedad y apropiación. Los detenidos están acusados de once delitos de robo con fuerza, un delito de falsedad documental, un delito de apropiación indebida y otro delito de pertenencia a grupo criminal.