DONOSTIA. La red de acogida de Irun ha denunciado este sábado que el Gobierno francés sigue devolviendo a España, de manera ilegal, a inmigrantes subsaharianos que han cruzado la frontera con destino al norte de Europa.

Esta red ciudadana se constituyó hace un año para ofrecer servicios a los inmigrantes en tránsito que llegaban a Irun con la intención de cruzar la frontera con Francia para continuar sus viajes.

Con motivo de su primer aniversario, los integrantes de esta red han ofrecido una rueda de prensa en la localidad fronteriza, en la que han informado de que han atendido en lo que va de año a 1.487 personas.

La red ha denunciado que la policía francesa sigue practicando "expulsiones ilegales" en la frontera de Irun, la última de ellas el pasado 23 de julio, cuando, según esta ONG, dos mujeres fueron detenidas en Burdeos, a 215 kilómetros de la frontera, y fueron devueltas a Irun "sin realizar ninguno de los trámites dispuestos por la ley".

Las condiciones en las que siguen llegando los inmigrantes son de "clandestinidad obligada" y "vulnerabilidad forzosa o inducida", por lo que la red seguirá ofreciendo sus servicios cuando lleguen a la ciudad guipuzcoana.

En concreto, entre enero y julio de 2019 se han atendido a 1.487 personas, de las que 95 eran menores, 129 mujeres y 1.263 hombres, la inmensa mayoría de ellos procedentes de África y con destino a países del norte de Europa.

La red ha lamentado que deba asistir a los migrantes "a la intemperie" debido a que "el Ayuntamiento de Irun sigue sin considerar necesario conceder un espacio donde se pueda atender a estas personas de manera adecuada".