El vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, ha compartido la posición de la ONU de que hubo "un uso excesivo" de la fuerza en el asalto a la valla fronteriza de Melilla, y ha aplaudido la "normalización" institucional con Catalunya tras el "momento rupturista" de los últimos años.

En una entrevista en Barcelona con el diario La Vanguardia, el vicepresidente y comisario para la Promoción del Estilo de Vida Europeo ha destacado positivamente la reunión que mantuvo este jueves con el presidente catalán, Pere Aragonès, en el Palau de la Generalitat, sede del gobierno autonómico catalán.

Respecto a los hechos sucedidos en la frontera entre Marruecos y Melilla (España), donde la pasada semana fallecieron al menos 23 migrantes, 37 según organizaciones humanitarias, Schinas lo ha calificado de "tragedia", pero ha considerado que "la frontera de la UE tiene que protegerse y esta es una responsabilidad colectiva".

Preguntado sobre el hecho de que la ONU afirmó que tanto Marruecos como España hicieron un "uso excesivo de la fuerza" en la frontera en la valla de Melilla, Schinas ha dicho "compartir esa opinión".

"Pero junto a mis colegas hemos pedido a nuestros vecinos que asuman sus obligaciones en la gestión de la inmigración. Por lo que, cuando las asumen, tampoco les podemos decir que no lo hagan. No quiere decir que lo tengan que hacer así, pero las condenas y los enfoques simples a veces no son suficientes para entender lo que está pasando en las fronteras de la UE", ha aseverado.

Sobre si debe acelerarse el acceso de Ucrania a la UE, Schinas ha apuntado que "era muy importante dar la señal de que Ucrania y Moldavia están con nosotros", pero ha dejado claro que "esto no debe significar un calendario artificial o acelerado", ya que "la historia demuestra que el éxito de la ampliación viene cuando no hay pasteleo. Los dos países se lo están tomando muy en serio".

Sobre el conflicto catalán, Schinas ha reconocido que "no es un secreto que hubo un momento difícil en el triángulo Europa-España-Cataluña" durante el proceso independentista catalán, un "momento rupturista" en el que Europa siempre asumió una posición "clara y transparente, enclavada en las realidades institucionales y constitucionales españolas y europea".

"Este mensaje, desgraciadamente, no se entendió en Cataluña en aquella época -ha agregado-. Pero ahora entramos en una lógica mucho más realista, de normalidad institucional. Esta visita marca el momento de pasar página".

Una idea que el vicepresidente de la Comisión "trasladó" al presidente catalán: "La vuelta a la normalidad es la consecuencia de este espíritu constructivo de realismo que domina aquí. Pero si hay otro momento rupturista y todos los demonios del pasado vuelven -ha advertido-, hay riesgo de cambiar esa lógica".