"Estamos destrozados". Con profundo dolor, Mohamed, padre de Ismail Chouiyenk, el joven fallecido en un atropello la pasada noche en la A-12 en Estella, relata que la última vez que vio a su hijo fue antes de la pandemia de coronavirus: "La última vez que vi a Ismail fue hace más de dos años. Desde entonces el ya no ha vuelto a Marruecos, se estaba buscando la vida en España".

La familia reside en Tánger, a 1.000 kilómetros de Estella, donde tuvo lugar el fatal accidente. Durante este martes, decenas de personas se han acercado a su casa para dar el pésame a la familia. "Ha venido mucha gente, porque era un chaval joven y es una verdadera pena", señala el padre de Ismail.

Mañana miércoles, Mohamed y uno de sus hijos viajarán en avión a Barcelona y de ahi vendrán a Navarra para repatriar el cuerpo del fallecido. De hecho, Ismail llevaba cerca de dos años viviendo en Estella, después de haber pasado una temporada en la Ciudad Condal.

Además, desde la Comunidad Musulmana de Navarra han lanzado una recolecta de dinero a través de sus mezquitas para cubrir los gastos de la repatriación del cadáver del fallecido a Marruecos.