Las ambulancias de soporte vital avanzado (conocidas también como ambulancias medicalizadas o UVI móviles) del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea cumplen 25 años desde su puesta en marcha en septiembre de 1997. Durante estos años, según informó el Gobierno de Navarra en una nota, han atendido 15.000 ictus, 13.000 infartos, 3.500 accidentes y 1.400 paradas cardiacas, entre otras urgencias graves.

Se trata de los dispositivos móviles que se utilizan para atender las urgencias vitales y las urgencias más tiempo-dependientes –como los ictus o los infartos, precisamente–, y están dotados de un equipo formado por un profesional de medicina, otro de enfermería y un técnico o técnica de emergencias sanitarias.

Para conmemorar este aniversario, en el día de ayer se celebró un acto en el Colegio de Médicos de Navarra, en el que se reconoció la labor realizada por el personal sanitario que hizo posible la puesta en marcha de las tres primeras ambulancias de soporte vital avanzado, en Pamplona, Tudela y Estella-Lizarra.

En el acto, participó la consejera de Salud, Santos Indurain, quien destacó el cambio que supuso la puesta en marcha de las ambulancias medicalizadas en la forma de atender las urgencias en Navarra, ya que, hasta entonces, la labor de los y las profesionales era acudir a recoger al paciente y llevarlo al hospital. “A partir de entonces, estos profesionales comenzaron a prestar asistencia sanitaria in situ a pacientes críticos, en el menor tiempo posible, estabilizarlos y, posteriormente, trasladarlos al centro hospitalario”, afirmó Induráin.

Durante su intervención, Santos Induráin mostró su agradecimiento a los familiares de José Luis Gómez de Segura, médico de la primera ambulancia medicalizada de Pamplona; Jesús Rico, médico de la primera ambulancia de Tudela; y Rosa Jiménez, enfermera de la primera ambulancia de Tudela, y les ha hecho entrega de una placa de reconocimiento. “Rosa, José Luis y Jesús fueron unos pioneros en la forma de entender las urgencias vitales, que ha redundado en la mejora de la calidad de vida y en la supervivencia de cientos de pacientes, y un orgullo para nuestro sistema sanitario”, subrayó la consejera.

Las placas fueron recogidas por Merche Marraco, viuda de José Luis Gómez de Segura que, a su vez fue enfermera también de esa primera ambulancia de Pamplona; Pilar Pérez, viuda de Jesús Rico y enfermera del Hospital Universitario de Navarra; y por un familiar de Rosa Jiménez.

Al acto de homenaje asistieron también, por parte del Gobierno de Navarra, el director gerente del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea, Gregorio Achutegui; el subdirector de Urgencias de Navarra, Kiko Betelu; y el jefe de sección de Emergencias y Transporte Sanitario, Alfredo Echarri. Asimismo, han acudido el vicedecano de la Facultad de Medicina de la UPNA, Tomás Belzunegui; la presidenta del Colegio de Enfermeras de Navarra, Isabel Iturrioz; el vocal del Colegio de Médicos, Carlos Beaumont; y el responsable a nivel estatal de los registros de parada cardiaca y politraumatizado y médico del 061 de La Rioja, Fernando Rosell, que ofreció una charla, desde el punto de visto técnico, sobre la importancia del soporte vital avanzado en la atención a las urgencias vitales.

LAS CIFRAS

  • 7 Ambulancias. En la actualidad, el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea dispone de siete ambulancias de soporte vital avanzado que se distribuyen en Pamplona (dos de 24 horas, y una de 12 horas), Tudela (una de 24 horas y una de 12h), Estella-Lizarra (una de 24 horas) y Tafalla (una de 24 horas). A lo que hay que añadir una ambulancia de soporte vital con enfermería en Pamplona.
  • 7.761 Intervenciones. Durante 2021, las ambulancias de soporte vital avanzado del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea realizaron un total de 7.761 intervenciones, una media de 21,1 veces por día.