La madrugada del domingo al lunes ha vuelto a ser tormentosa en buena parte de Navarra, con abundante aparato eléctrico sobre todo en zonas del centro y del oeste de la Comunidad, dificultando aún más el sueño en una noche calurosa. Los sistemas de observación de Aemet detectaron 7.600 rayos, la mayor parte de ellos durante la madrugada y últimas horas del día. Las zonas de mayor densidad fueron la Ribera, la zona occidental y al norte de Pamplona.
Las precipitaciones han vuelto a ser abundantes, también en las primeras horas del lunes, más intensas en Tierra Estella y Comarca de Pamplona, con acumulaciones que rondaban ya a mediodía los 20-30 mm en algunos puntos.
"La línea convectiva se extiende desde La Rioja Baja hasta Baztan", destaca Aemet, que pronostica la misma tónica en las próximas 48 horas y ha decretado alerta naranja entre las 15:00 y las 19:59 horas en vertiente cantábrica, centro de Navarra y Pirineo.
En Los Arcos, Bomberos de Navarra han tenido que intervenir para retirar tres árboles que amenazaban con caer sobre la carretera. En varios municipios del oeste y centro de la Comunidad ha vuelto a ser necesario achicar agua en bajos y atender desperfectos causados por las lluvias. En Lérruz (Lizoain-Arriasgoiti), la caída de un rayo ha provocado un incendio que ya ha sido extinguido. No se han registrado daños personales.
Granizada en Fitero, Corella y Cintruénigo
Las localidades riberas de Fitero, Corella y Cintruénigo sufrieron durante la madrugada del sábado al domingo un episodio de intensas lluvias y granizo que provocó diversas afecciones, así como daños en el campo y en propiedades privadas, como vehículos.
Con el objeto de conocer la situación, los consejeros de Cohesión Territorial, Óscar Chivite, y de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, José Mari Ayerdi, se han desplazado hasta la zona.
Las fuertes precipitaciones ayer anegaron las calles, convirtiéndolas en ríos, mientras que la intensa granizada dejó un manto blanco. Para llevar a cabo la limpieza de las calles de estas localidades fue necesario el uso de máquinas retroexcavadoras.
Se teme que la granizada haya causado pérdidas considerables en el campo. “Va a haber daños importantes en la cosecha de oliva, uva, almendra...”, aseguró ayer Gorka García, alcalde de Corella. En el caso de esta localidad, la tormenta de granizo se inició sobre las 3.00 horas y se formó una capa de unos 3 centímetros de hielo. “En la vida había visto una granizada de esta magnitud. Era sorprendente por la violencia con la que cayó. El cambio climático es una realidad”, afirmó el primer edil corellano.
Entre las consecuencias de la tormenta, “hubo arquetas levantadas, arboles caídos, coches dañados... También hay muchos garajes y bajeras que se inundaron”. “La brigada municipal está limpiando el pueblo”, destacó García.
Oliva, uva, almendra...
En cualquier caso, “la zona más castigada por la granizada es el campo y va haber daños importantes en la cosecha de oliva, uva, almendra... Ahora será momento de evaluar los daños y esperar que los seguros respondan”, reiteró el alcalde de Corella.
Por su parte, en Cintruénigo las lluvias anegaron el túnel que pasa por debajo de la carretera N-113 y sirve de acceso al polígono, un punto que suele inundarse en episodios de precipitaciones. También hubo “alguna alcantarilla desprendida, pero en general se ha tratado de daños menores”, señalaron fuentes municipales.
UPN anunció ayer que presentará en el Parlamento de Navarra una declaración institucional para pedir que se declare zona catastrófica a los municipios de Fitero, Cintruénigo y Corella.
Además, durante la madrugada de ayer se produjeron precipitaciones de intensidad fuerte o muy fuerte en zonas como Irurtzun, donde se alcanzaron los 30 litros por metro cuadrado en una hora. Las células más activas descargaron en zonas como Tierra Estella y Sakana, según resaltó la Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) en sus redes sociales.
La previsión del tiempo en Navarra para los próximos días
La previsión para hoy es de cielos nubosos, con abundante nubosidad de evolución a partir de mediodía y lluvias y chubascos por la tarde que podrían ser persistentes en los valles de Baztan y Bidasoa. Las temperaturas mínimas sin cambios o en ligero descenso, con las máximas en descenso y viento flojo variable. El Gobierno de Navarra recomienda circular con precaución por toda la red de carreteras ante la posibilidad de chubascos acompañados de tormentas, en la Vertiente Cantábrica, y en general después por la tarde, cuando podrían ser fuertes o persistentes en algún punto del centro o del norte.
Para mañana martes se espera cielo nuboso o cubierto en la mitad norte e intervalos nubosos en la mitad sur, con lluvias y chubascos generalizados, con tormentas ocasionales, menos frecuentes en el extremo sur. Las temperaturas en descenso, más acusado el de las máximas, y viento flojo de componente norte.
El miércoles será un día poco nuboso en la mitad sur y nuboso en la mitad norte, donde se esperan algunas lluvias o chubascos dispersos, más frecuentes en la parte oriental, donde pueden ir acompañados de tormentas. Las temperaturas mínimas sin cambios y máximas en ligero ascenso, con viento del noroeste, en general flojo.
El jueves ser prevén intervalos nubosos de nubes bajas al principio, con tendencia a despejarse, y aumento a intervalos nubosos de evolución en el Pirineo, donde no se descarta algún chubasco.
La DANA dejó la mitad de lluvias de todo el otoño
Las precipitaciones que se produjeron entre el viernes y sábado de la semana pasada en la Cuenca de Pamplona “igualan a todo lo que climatológicamente se acumula en los meses de septiembre y octubre, y es más de la mitad de toda la precipitación otoñal”.
Así lo aseguró ayer la Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) al analizar la repercusión de la DANA que dejó precipitaciones históricas el pasado fin de semana, con cifras de récord en varias localidad, como de Pamplona, donde se acumularon 146,9 l/m2 en menos de 24 horas. En Tierra Estella y en el Pirineo también se superaron o se rozaron los 100 l/m2. En estas zonas llovió más que lo que lo había hecho en los últimos tres meses y en concreto, en Pamplona, cayó el triple de agua de la que se registra de media en todo el mes de septiembre. Las lluvias torrenciales provocaron numerosas incidencias relacionadas, sobre todo, con embalsamientos de la calzada y achiques de agua, en más de 50 localidades navarras.
