Un espectador de 67 años ha resultado herido de gravedad tras ser corneado en una pierna por el astado que este martes por la mañana ha protagonizado en Tordesillas (Valladolid) el festejo del Toro de la Vega, que ha sembrado el pánico al romper la talanquera, escapar del recorrido y revolcar a varias personas.

El hombre fue corneado en una pierna, por lo que después de serle practicado un torniquete, ha sido evacuado de urgencia hasta la enfermería de la plaza de toros del municipio, donde ha sido operado, según ha explicado a EFE el presidente de Cruz Roja en Tordesillas, Iván de la Cruz.

Tras ser operado, este vecino de Tordesillas ha sido evacuado en una ambulancia hasta el Hospital Clínico Universitario de Valladolid, según informa en su edición digital el diario El Norte de Castilla.

El animal fue anestesiado con un dardo tranquilizante por parte del equipo de campo responsable del festejo y trasladado en un vehículo-pala hasta los corrales del coso, concluyendo así un evento que ha durado cerca de una hora y quince minutos.

El herido, que sangraba en abundancia, presenciaba el festejo en la empalizada de madera que delimita la zona vallada del campo abierto, cerca de la rotonda que separa sendas carreteras con dirección a Salamanca y a Madrid.

En este lugar se emplazó el toro, de nombre "Mirabajo", un astado de cinco años, de 550 kilos y herrado en la ganadería salmantina de Pío Tabernero de Vilvís, quien acometió la empalizada de madera, rompió los gruesos travesaños de madera y escapó hacia la antigua carretera de Madrid.

En su huida revolcó a varios espectadores y empitonó a uno de ellos en una zona que suele estar muy concurrida con remolques, palas, camiones y otros vehículos donde se sitúan numerosas personas para contemplar el espectáculo.

El Toro de la Vega, enmarcado en las fiestas patronales de Tordesillas, se celebra sin lanzas como era tradicional y sin muerte en público como era tradicional, hasta que fue prohibido en 2016 por la Junta de Castilla y León a través de un decreto-ley.

En enero del pasado año el Ayuntamiento de Tordesillas, siempre dentro de la ley, trató de recuperar el carácter de torneo con la propuesta de un concurso consistente en clavar arponcillos adornados, al modo de las divisas que lucen los astados en las corridas de toros para identificar su procedencia.

Un recurso interpuesto por el Partido Contra el Maltrato Animal (PACMA) frustró esta iniciativa al ser paralizada por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL), por lo que desde 2016 el Toro de la Vega tiene la categoría de espectáculo taurino tradicional similar a la suelta de un toro desde un cajón.

No obstante, el trapío del animal, el horario, escenario y organización son exactamente iguales al tradicional torneo de lanzas ya suprimido.