La máquina del tiempo se pone en marcha estos días en el Palacio de Navarra para reunir en la sede del Gobierno foral a personajes como el Rey Sancho VII El Fuerte, el Príncipe de Viana o la Reina María Cristina de Borbón-Dos Sicilias. Más de 200 personas podrán disfrutar a partir de esta tarde del nuevo ciclo de recorridos programado por la planta noble de este edificio de estilo neoclásico, inaugurado en 1851 y ‘kilómetro cero’ de las carreteras navarras, con acceso desde la avenida San Ignacio 1 y la avenida Carlos III 2 de Pamplona / Iruña.

Las visitas, con entradas agotadas desde el primer día que se pusieron a disposición del público, están capitaneadas por un peculiar relojero con acento catalán (primera sorpresa del montaje) que se encuentra en su camino por las distintas estancias del Palacio de Navarra con otros personajes que amenizan el recorrido. El grupo de teatro Butaca 78 Eserlekua es el encargado del espectáculo, que se ha ofrecido al público con motivo del Día de Navarra de 2022 y 2023 y, por tercera vez, estas navidades. 

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Chivite en la primera visita teatralizada al Palacio de Navarra Javier Bergasa

Txori García (relojero), Javi Chocarro (Sancho El Fuerte), Iratxe García (Reina María Cristina), Rosa Nagore (matrona de Navarra) y José Mari Asín (Carlos, Príncipe de Viana) son los cinco actores que protagonizan el montaje, con momentos en los que hacen ‘doblete’ interpretando otros personajes sorpresa. En la edición de 2022 también participaron en la obra la actriz María Meriguor y los actores Javier Baigorri y Jesús Javier Elizondo. 

La dirección artística corre a cargo de Leire Ruiz y la idea y dramaturgia es obra de Laura Laiglesia. El equipo cuenta además con María Gastón para peluquería. El montaje ha requerido que Butaca 78 Eserlekua se documente a fondo sobre los pasajes de la historia de Navarra que les interesaba contar y sobre las dependencias del Palacio de Navarra más destacadas, a fin de buscar un hilo conductor que haga amena la visita. La variedad de personajes permite repasar la historia desde diferentes épocas, caracteres y puntos de vista, unos más solemnes y otros más histriónicos.

“Había que dar color a la historia mezclando la historicidad y el espectáculo. El guion tuvo muchos borradores hasta dar con el definitivo, que tenía dinamismo y a la vez era informativo, intercalando diálogos, monólogos o conversaciones, además de sorpresas y momentos de clímax. Se mezclan momentos más divertidos con momentos más intensos y dramáticos para darle una coherencia no sólo histórica, sino también artística”, explica Laura Laiglesia. 

Los textos buscan contentar tanto al “espectador erudito” como al que no conoce tanto la historia, teniendo en cuenta que a las visitas acuden desde niños y niñas a personas de avanzada edad. “Los actores y actrices pronto hicieron el texto suyo y le dieron esa comicidad, cotidianidad y verdad que necesitaba para no caer en el peligro de una lenta clase de historia”, indica Laiglesia.

De la Batalla de las Navas de Tolosa al ‘Follow the lider’ 

Durante la visita se narran episodios como la Batalla de las Navas de Tolosa (1212), las guerras entre beaumonteses y agramonteses, la firma del Privilegio de la Unión (1423), el conflicto por la sucesión de Fernando VII que desencadenó, entre otros factores, la primera Guerra Carlista (1830) o la gran manifestación en defensa de los fueros conocida como la ‘Gamazada’ (1893). No faltan referencias a la actualidad, con chascarrillos sobre la conexión de los tapices flamencos con Camarón o el recurso del relojero a la canción ‘Follow the lider’ para mover a los grupos entre las distintas estancias. 

El recorrido comienza ascendiendo por las escaleras de la zona noble para acceder al primer piso, donde los grupos de visitantes pueden conocer dependencias como el Despacho de Presidencia (usado por última vez por Miguel Sanz), el antiguo Salón de Sesiones, la capilla, el Salón Verde o el Salón del Trono, donde se pueden ver entre otros muchos detalles la galería de retratos de los 32 Reyes y Reinas de Navarra y la matrona que preside la cubierta, rodeada de figuras alegóricas que representan las "cuatro virtudes cardinales" de la prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza. 

Con una narración llena de guiños humorísticos, se conocen también algunos de los objetos más valiosos que se conservan en el Palacio de Navarra, como la réplica de las cadenas que según la leyenda rompió Sancho El Fuerte para acceder a la tienda del califa almohade Al-Nasir en la Batalla de las Navas de Tolosa, las mazas de las Cortes de Navarra, los tapices flamencos de Francisco Van Der Hecke basados en diseños de Rubens o un retrato de Fernando VII realizado por Francisco de Goya. 

También se da detalle de los murales de Gustavo de Maeztu con escenas costumbristas, históricas y paisajes de Navarra, la cabeza de apóstol de Jorge Oteiza, los ricos artesonados del techo o el valioso suelo de finas taraceas de madera del Salón del Trono, de la firma parisina Laurent, motivo por el que se avisa a las visitas para que no acudan con calzado de tacón. Da juego a la ‘trama’ el bargueño renacentista ubicado en el acceso al Salón de Sesiones, un delicado mueble de madera que sirve al relojero de Palacio para recordar el celo que la Institución Príncipe de Viana pone en la conservación del patrimonio de Navarra. 

Especial interés despiertan las vidrieras con 155 escudos de municipios de Navarra, donde quien más y quien menos trata de buscar el suyo. “Más de uno le pregunta al relojero a ver si sabe dónde está tal pueblo”, explica Laiglesia. 

La escenografía que aporta el Palacio de Navarra, con su mobiliario clásico y el ‘tin tin’ de sus relojes de carrillón y sobremesa, resulta idónea para que los actores y actrices aporten veracidad al relato y trasladen al público por las distintas épocas que se mencionan. “Hay quien no se creía que los tirabuzones de la reina María Cristina fueran una peluca y quien se ha creído que el enfrentamiento entre algunos personajes era real y ha intentado mediar”, asegura la directora. 

Cabe destacar que el grupo Butaca 78 cuenta para la actuación con la ayuda extra de la Policía Foral, que además de garantizar la seguridad y ayudar ante cualquier problema que surja durante las visitas les ayuda con los efectos de luz en uno de los momentos clave. “Ya casi forman parque del equipo”, asegura Laiglesia. 

El Palacio abre sus puertas

El Palacio de Navarra es un edificio en pleno uso administrativo y político, donde están ubicados los despachos de la Presidenta María Chivite Navascués, los vicepresidentes Félix Taberna, Ana Ollo y Begoña Alfaro y la consejera Amparo López, además de personal funcionario. Pese a ello, haciéndolo compatible con la actividad oficial, el Gobierno de Navarra viene promoviendo desde hace años con motivo del Día de Navarra la iniciativa ‘El Palacio abre sus puertas’ con gran éxito de público, como lo demuestra lo rápido que se agotan las entradas ofertadas, de carácter gratuito.

Las visitas se trasformaron el año pasado en montajes teatralizados, diseñados por Butaca 78 en colaboración con la Dirección de Proyección Institucional y Marca Navarra del Departamento de Presidencia e Igualdad. Butaca 78 crea e interpreta obras y es también una escuela de actores y actrices fundada en 2012, que actualmente cuenta con más de 260 alumnos de edades comprendidas entre los 6 y los 80 años, repartidos por grados en interpretación teatral y ante la cámara. 

Además de esta propuesta teatralizada, muchos viernes del año se realizan visitas para grupos o asociaciones que lo solicitan. A ello se suman las recepciones oficiales en las que se enseña a los invitados e invitadas las estancias más reseñables del Palacio, como la organizada este mismo miércoles para los navarros y navarras residentes en 18 países del extranjero que han participado esta semana en el VI Encuentro Next.