Una de las alumnas que participó en el programa Raíces/ Sustraiak de la UPNA fue Maite Barguilla. Esta joven de sexto de ADE y Derecho Internacional pudo efectuar sus prácticas en Santacara con el objetivo de realizar un estudio para la reactivación económica y turística de la zona a través de la puesta en valor del patrimonio cultural. Sin embargo, la propia Maite destacó los problemas de desplazamiento y alojamiento a los que se enfrentan, que derivan en que “no es fácil quedarse en los pueblos”. Ella reconoció la “suerte” que tuvo de poder trabajar en su propio pueblo, con esa ventaja que supone sobre sus compañeros. Por eso añadió que “hay que trabajar mucho en ese sentido, para que los jóvenes puedan echar raíces y quedarse, porque hay gente que de verdad quiere hacerlo pero no tiene la oportunidad”. 

Por su parte, la representante del Ayuntamiento de Santacara le dio la razón a la alumna al asegurar que, a pesar de que la localidad solicitó participar en el programa en todas las ediciones, solo Maite estuvo interesada en realizarlas. “Entendemos que para los estudiantes es difícil alojarse y desplazarse a una localidad pequeña como esta”.

Con este mismo problema se encontró Bargota, en Tierra Estella con 254 habitantes. Aunque en el primer año no pudieron participar, lograron poner en marcha otra iniciativa contra la despoblación, que ha derivado en el proyecto Tejiendo caminos en el que participan diecisiete municipios de la Sierra de Codés. En esta idea trabajaron los antiguos alumnos de la UPNA y vecinos de Bargota, Markel Fernández, graduado en Educación Primaria, y Jon Fernández, en Ingeniería Agrónoma y actual coordinador de Tejiendo caminos. El año pasado los dos realizaron un censo de parcelas en desuso con la intención de “revitalizar un poco la actividad económica de la zona”. Esta labor la llevaron a cabo con un llamamiento a la gente de fuera del municipio para vivir y trabajar los pueblos y parcelas que no se cultivan y no se trabajan. Según Jon, fue “una forma de poner en contacto a los propietarios de las parcelas y la nueva gente que quiere vivir en los pueblos”. 

A la presentación también acudió un tercer vecino de Bargota, el estudiante de tercero de Ingeniería Industrial Sergio Mendaza. Aunque aún no ha participado en el programa, mostró su interés en hacerlo para darle “un poco de aire fresco y ayudar a mis compañeros”.