Primero fueron familias del colegio público Catalina de Foix y esta tarde las quejas llegaron desde la apyma del CP Auzalar de Orkoien. Escasez de comida, alimentos en mal estado... “La situación es inaceptable y exigimos una solución. Es la alimentación de nuestros hijos e hijas”, han señalado.
Desde este curso, la empresa de catering Aramark se encarga del comedor de este colegio, al igual que del colegio zizurtarra. “Las trabajadoras nos escribieron el martes para informarnos de que no había llegado puré para todos y en lugar de eso les habían servido algo de ensalada y les han ofrecido repetir tortilla”, ha explicado la apyma y ha añadido que “sabemos que niños que siempre comían bien ahora no están comiendo, que las trabajadoras han echado para atrás algunas entregas de alimentos por considerar que estaban en mal estado... En definitiva, problemas de cantidad y de calidad”.
Ante esta situación, hay familias que han decidido desapuntar a sus hijos, otros van a devolver la cuota o les van a llevar con tupper. “Estamos a la espera de reunirnos con las partes implicadas para que nos den una solución”, han afirmado.
Reunión de Educación con la empresa
Por su parte, el consejero de Educación del Gobierno de Navarra, Carlos Gimeno, ha manifestado este miércoles por la mañana que había reuniones previstas en el departamento con la empresa de catering que sirve en el colegio público Catalina de Foix, en Zizur Mayor, donde no se sirvió el pasado lunes el segundo plato en el comedor por estar la carne "fría o mal cocinada".
En la rueda de prensa tras la sesión de Gobierno, Gimeno ha aclarado que "no estábamos hablando de una partida de carne en mal estado" si no que "estaba fría o estaba mal cocinada, pero la carne no estaba en mal estado" y que "no se sirvió el segundo plato". "Hoy había reuniones en el departamento con los gerentes de la empresa para determinar y subsanar todas las cuestiones", ha explicado.
Según ha detallado, "el Departamento ayer ya trasladó a todos los servicios de Inspección de los servicios complementarios, los correspondientes al comedor, y trasladó a la dietista que tiene el departamento, para que supervisara la recepción y el control de toda la comida". "Obviamente son cuestiones que las familias no tienen por qué asumir, no tienen por qué soportar y el departamento va a estar supervisando, efectivamente, encima", ha advertido.
Gimeno ha insistido en que "hoy ha habido varias reuniones en el departamento para controlar esta cuestión, que se circunscribe sobre todo a un centro".
