Los adolescentes navarros son los que más se emborrachan del Estado y dos de cada cinco reconoce haberse pegado un atracón de alcohol en el último mes. Es una cifra preocupante que refleja un reciente informe del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN) en el que también se refleja que el 58,7% de los navarros de entre 14 y 18 años (tres de cada cinco) se ha emborrachado alguna vez en la vida.
Este estudio recoge los datos de las encuestas del Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad –el informe Estudes (de 14 a 18 años) y el Edades (de 15 a 64 años)– que se realizan cada dos años y contienen información desgranada por comunidades. Ahora, Salud Pública ha completado ambos estudios para Navarra con una muestra de población más amplia, lo que permite afinar más las estadísticas y reducir el margen de error, ya que al ser la Comunidad Foral un territorio pequeño existen fluctuaciones de datos entre unos años y otros.
Así, con esta ampliación de la información Salud Pública refleja que el 64,1% de los adolescentes navarros ha probado el alcohol, más de la mitad (52,2%) se ha emborrachado en el último año –porcentaje más alto del Estado, cuya media se queda en el 42,1%– y dos de cada cinco (39,3%) han practicado el binge drinking –atracón de alcohol– en el último mes, en otras palabras, han ingerido la mayor cantidad posible de bebidas alcohólicas en el menor tiempo posible.
Llama la atención, además, que, al contrario que en adultos, son las mujeres las que consumen más alcohol entre los 14 y los 18 años: el 67,5% de las chicas navarras ha probado bebidas alcohólicas en el último mes y más de la mitad de ellas (56,1%) se ha emborrachado en el último año. En el caso de los chicos, esos porcentajes se reducen al 60,8% y al 48,9%, respectivamente.
Además de los consumos de alcohol, las encuestas ampliadas por Salud Pública también recogen datos de tabaco, cannabis, cigarrillos electrónicos, hipnosedantes y bebidas energéticas. La tendencia entre los más jóvenes es clara: crece el consumo de vapeadores a la par que desciende el número de fumadores. De hecho, en casi dos décadas, los adolescentes que consumen tabaco diario en Navarra se han reducido a la mitad: en 2006 el 16,9% fumaba todos los días y en 2023 –último año con datos– ese porcentaje era del 8,8%.
Eso sí, ellas de nuevo vuelven a presentar consumos más altos que los chicos: el 9,6% de las chicas navarras fuma a diario frente al 8,2% de los varones. En cuanto al cannabis, uno de cada cuatro jóvenes de 14 a 18 años (23,4%) se ha fumado un canuto en el último año.
Descenso en adultos
Como punto positivo, el informe refleja que en la población general los consumos de alcohol y tabaco se han reducido en los últimos años, pasando de ser de los más altos del Estado a estar actualmente por debajo de la media. De hecho, los consumos de alcohol y tabaco en la Comunidad Foral registran sus tasas más bajas en 15 años.
No obstante, pese a la mejoría de las cifras la prevalencia no es baja: tres de cada cinco navarros de entre 15 y 64 años (62,2%) reconoce haber bebido en el último mes, mientras que uno de cada cinco (19,8%) asegura haberse cogido una borrachera en el último año. Lo que pasa es que esta incidencia es mucho más baja que la que se registraba en 2022, cuando el 71% de los navarros había consumido alcohol en el último mes y el 27,5% se había emborrachado en el último año.
En cuanto al consumo de tabaco, la evolución ha sido similar: el porcentaje de fumadores llevaba una tendencia descendente en la última década pero con la llegada de la pandemia se disparó, pasando del 24,2% en 2017 al 32,3% en 2022. No obstante, tras ese pico, en estos dos últimos años se ha logrado disminuir drásticamente ese porcentaje y actualmente solo el 19,8% de los navarros aseguran fumar todos los días, una cifra muy por debajo de la media estatal, que se queda en el 25,8%. Sin embargo, dos de cada tres personas reconoce haber probado un cigarro alguna vez (67,5%).
El 17% de navarros ha fumado un vaper alguna vez
Por otra parte, la moda de los vapers es un nuevo fenómeno que parece que ha venido para quedarse. Mientras el consumo de tabaco registra la cifra más baja de la última década, la aparición de los cigarrillos electrónicos –o vapeadores– ha abierto una nueva vía de consumo, que preocupa especialmente entre los más jóvenes, y es que el 17,1% de la población navarra ha vapeado alguna vez en la vida.
El informe de Salud Pública evidencia que el consumo de cigarrillos electrónicos se disparó el año pasado: en 2019 el 11,7% de la población navarra de entre 15 y 64 años reconocía haber vapeado alguna vez, porcentaje que ascendió al 12,5% en 2022 y que el año pasado repuntó hasta el 17,1%, siendo el consumo mayor entre las mujeres (17,5%) que entre los hombres (16,7%).
Sin embargo, estos cigarrillos electrónicos han penetrado con mayor facilidad entre los más jóvenes. Según las estadísticas de Salud Pública, casi la mitad (48,5%) de los estudiantes de 14 a 18 años reconoce haber consumido alguna vez en su vida un vaper con o sin nicotina y el 45,1% haber consumido pipas de agua, más conocidas con el término cachimbas o sishas.
El mayor problema que presentan estos nuevos consumos es su baja percepción de riesgo: solo el 37,9% piensa que fumar cigarrillos electrónicos puede causar bastantes o muchos problemas, frente al 76,8% que piensa lo mismo de fumar entre 1 y 5 cigarrillos de tabaco convencional.
Lo mismo ocurre con las bebidas energéticas, cuyo consumo, alertan los expertos, ha ido en aumento en los últimos años. Actualmente, el 14,4% de la población navarra las ha probado en el último mes, especialmente los hombres (19,1%), aunque vuelve a ser entre los jóvenes donde se da el mayor consumo: el 42,8% de los adolescentes ha ingerido bebidas energéticas en el último mes.