La formación de autoprotección ante desastres naturales como los terremotos, los incendios o las inundaciones se incorpora a la oferta que se hace a los centros educativos navarros dentro del Plan Director para la Convivencia y la Mejora de la Seguridad Escolar. Durante el pasado curso, 76.708 escolares, un 12% más que el año anterior, participaron en las actividades del Plan que coordina el área de la Alta Inspección de Educación de la Delegación de Gobierno en Navarra. A estas cifras se suman los más de diez mil docentes que han asistido a formaciones a través de los programas Skolae y Laguntza, llevados a cabo por Educación.
Estos datos los facilitó la delegada del Gobierno en Navarra, Alicia Echeverría, y la directora de la Alta Inspección de Educación en Navarra y coordinadora del Plan, María Yolanda Salinas, quienes hicieron un balance positivo del plan que han descrito como “vivo y dinámico, adaptado a las necesidades cambiantes en el ámbito de la prevención y la seguridad”. Su implementación y buena marcha, han subrayado, ha sido posible gracias a la colaboración entre las diferentes entidades estatales, autonómicas y locales y los servicios de seguridad en un “esfuerzo conjunto que busca asegurar que las escuelas no sean solo lugares de aprendizaje, sino también espacios de paz donde los hijos puedan desarrollarse de manera integral”.
El aumento de la demanda de las actividades por los centros se ha visto acompañado a su vez por un incremento de la oferta formativa, en la que se ha incluido como novedad la autoprotección ante desastres naturales por parte de voluntariado de Protección Civil.
En concreto, se ofertan acciones tituladas Terremotos: cuando el suelo tiembla, yo actúo, Incendios: con el fuego no se juega y Con el agua al cuello como proyecto piloto con actividades de autoprotección ante desastres naturales dirigido a niños y niñas de 5º y 6º de Primaria y adolescentes de ESO y de FP Básica.
Al respecto, indicaron que en Navarra el Gobierno foral va a firmar con Protección Civil un protocolo ya que esta formación va a ser obligatoria en los centros escolares. Mientras tanto, desde el citado plan se han puesto “tímidamente en marcha” algunas de estas acciones, que se imparten en horario escolar y se ofrecen a toda la red de centros educativos.