La salud mental ha dejado de ser un tabú entre los jóvenes, sobre todo entre las chicas, aunque éstas se muestran más vulnerables frente a problemas como la depresión, la ansiedad o los trastornos de conducta alimentaria, cuya prevalencia en ellas es de casi el doble.
Un 86 % de chicas señala haber sufrido o conocer a otra joven que ha tenido algún problema de salud mental y el 15 % declara tener problemas concretos, el doble que los chicos (7 %), según el último informe de Plan Internacional sobre el estado de la adolescencia en España.
Sin embargo, las últimas crisis que han vivido los más jóvenes, nacidos entre 2001 y 2020, como la pandemia y su confinamiento, los conflictos armados y las crisis climáticas, como las danas o los incendios, ha hecho que los jóvenes integren los problemas de salud mental en su salud general y hayan dejado de ser un tabú.
Los expertos que han participado en el informe Plan Internacional señalan que los jóvenes de ahora se informan y han aprendido a nombrar los problemas de salud mental que afectan a su generación, como la ansiedad a la adicción al móvil o el riesgo de las tecnologías y la presión de las redes sociales.
Mayor conciencia educativa
Una mayor concienciación de los centros educativos, la obligatoriedad de que exista un coordinador de bienestar social, y medidas preventivas implantadas en los propios colegios y universidades han dado mayor visibilidad a problemas de los que antes no se hablaba.
Un ejemplo es la campaña 'YoSoyTuParaguas' de la Fundación Universitaria San Pablo CEU en la que participan los seleccionadores nacional de fútbol y de baloncesto, Luis de la Fuente y Chus Mateo, respectivamente, para conversar sobre salud mental "sin miedo" y para romper estigmas.
El mundo educativo está más involucrado en valorar la salud mental pese a que el I Barómetro EducAcción respaldado por la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y elaborado por Mestroscopia sobre una muestra de 2.000 entrevistas señala que el 70 % de la población adulta cree que no se toman las suficientes medidas sobre la prevención del suicidio, la ansiedad, las adicciones y la agresividad.
Docentes y expertos proponen decálogos para reconocer las emociones y actuar ante señales de alerta pidiendo ayuda mientras que las organizaciones de estudiantes también reclaman a las instituciones que se tomen la salud mental como un "derecho educativo".
La mitad de los universitarios reclaman apoyo
La Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas (CREUP) advierte de que más del 50 % del alumnado universitario ha sentido la necesidad de recibir apoyo psicológico en el último año y uno de cada cinco estudiantes ha tenido pensamientos suicidas en las semanas previas al estudio.
Crear una Estrategia Nacional de Salud Mental Universitaria, mayor financiación para servicios de atención psicológica en todas las universidades públicas, garantizar un mínimo de psicólogos y psicólogas por cada 1.000 estudiantes, programas de prevención y sensibilización o una evaluación de los planes de salud mental universitarios existentes, son algunas demandas de la CREUP.
La encuesta realizada por 40dB para Plan Internacional señala que la percepción de mayor vulnerabilidad en la salud mental es más alta en universitarios, entre los 17 y los 21 años sienten más deteriorado su bienestar emocional.
Y la diferencia se acentúa entre las chicas, ya que mientras el 75 % de los chicos entrevistados se sienten satisfechos con su salud mental, en las chicas la cifra baja al 67 %. Los trastornos más comunes son la ansiedad, la depresión y, en menor medida, los pensamientos suicidas y los trastornos alimentarios.
Casi 4 de cada 10 chicas dicen haber sufrido ataques de ansiedad o pánico, frente al 23 % de los chicos, mientras que la depresión la sufre el 26 % de chicas y el 17 % de chicos.
Lo mismo ocurre con los pensamientos suicidas, la encuesta señala que está presente en el 23 % de ellas y los trastornos de la conducta alimentaria en el 22 %.
El Instituto de Salud Carlos III y la Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental (FEPSM) han recordado en su último congreso sobre conducta suicida en la población joven que en 2023 el número de muertes por suicidio en menores de 25 años ascendió a 200, aproximadamente el 5 % de todas las muertes por suicidio en España.
Y más del 96 % de los intentos de suicidio en hombres y mujeres, tienen como base un trastorno mental, la mayor parte trastornos de personalidad y trastornos relacionados con la ansiedad. Ambos ligados a factores de maduración psicológica, entorno familiar y social.
Educar desde la infancia
La psicóloga Yolanda Romero, especialista en infancia y adolescencia y directora técnica del Instituto Clínico de Psicología Infantil y del Adolescente incide en la importancia de educar en hábitos saludables y estabilidad emocional desde la infancia.
Rutinas diarias, fomentar la autonomía desde los cinco años, encontrar un equilibro entre la sobreprotección y la ausencia emocional, transmitir calma, coherencia o aceptar los errores como parte del proceso, son herramientas que señala esta experta en un comunicado.