El conductor fallecido en accidente de tráfico en Caparroso este pasado domingo, Renato Nahuel Bettini, se acababa de ordenar sacerdote el pasado 22 de junio, en la Catedral de Santa María la Real de Pamplona. Natural de Córdoba (Argentina), y miembro del Camino Neocatecumenal, cursó sus estudios en el Seminario Redemptoris Mater de Pamplona.

Su repentina muerte ha causado gran conmoción entre los vecinos de Peralta y Funes, donde era vicario parroquial, así como entre sus compañeros del Seminario y sacerdotes. También en la Casa de la Misericordia de Pamplona, donde ejerció el sacerdocio el pasado verano.

El arzobispo Francisco Pérez ha mostrado su dolor a través de un comunicado, en el que pide que se ofrezcan sufragios por él. "Ante el Señor en el Sagrario y con el dolor profundo por el fallecimiento de Renato, nos unimos a toda su familia que vive en Argentina, a los pueblos de Peralta y Funes a los que servía pastoralmente en comunión junto con don Jorge Tejero, a las Comunidades Neocatecumenales con los que aprendió a donarse a Cristo y su Iglesia", afirma el arzobispo, quien añade que "nuestro dolor se convierte en la certeza que Renato vive en el amor misericordioso de Cristo Resucitado. Ofrezcamos sufragios y oraciones por su eterno descanso".

Por último, Francisco Pérez da "las gracias a las Fuerzas de Seguridad del Estado en la Policía Foral y Guardia Civil, a los Bomberos y a las atenciones del Hospital Universitario de Navarra".