El Juzgado de Instrucción número 5 de Pamplona ha ordenado este sábado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de la mujer que fue detenida el viernes por acuchillar a otra en un domicilio del barrio de San Jorge de la capital navarra. La jueza le imputa un delito de homicidio en grado de tentativa.

La encausada fue detenida por la Policía Municipal pasadas las 8.00 horas del viernes en un piso del número 12 de la calle Doctor Alexander Fleming. Minutos antes, en esa misma vivienda había agredido con un cuchillo a otra mujer que tuvo que salir al rellano a pedir auxilio a otros vecinos.

Los agentes movilizados detuvieron a la supuesta autora de la agresión y también recuperaron el cuchillo empleado en el ataque, mientras que la víctima fue trasladada al Hospital Universitario de Navarra (HUN) para que fuese atendida de las heridas por arma blanca sufridas, que le ocasionaron una abundante pérdida de sangre.

De 5 a 7,5 años de cárcel

La mujer arrestada por la Policía Municipal ha sido puesta a disposición judicial en la mañana de este sábado y la jueza de guardia, a instancias del Ministerio Fiscal, ha decretado su encarcelamiento imputada por un delito de homicidio en grado de tentativa, que está castigado con una pena de 5 años a 7 años y seis meses de cárcel.

De la declaración prestada por la investigada, reconoce que ya anteriormente había existido entre ellas discusiones y agresiones y que, al verla en la habitación, “fue a buscar un cuchillo a la cocina, para prevenir la situación que pudiera resultar”, se recoge en el auto de prisión.

La denunciante manifestó que la investigada le dijo que “la iba a matar y acabar con su vida”, pero aunque existiera una discusión entre ellas, lo que “resulta evidente es que los medios usados por la investigada para según dice, prevenir una agresión de la denunciante, no son para nada proporcionados, creando con ello una situación de gran desventaja para la denunciante, lo que a priori, parece indicar es que su intención era realmente causarle daño en su integridad física”, subraya la magistrada.

Ni siquiera la auxilió

Con posterioridad al acuchillamiento, añade la jueza, la agresora “no tuvo ninguna intención de auxiliar a la víctima, ni ayudarla de ninguna forma”. En este sentido, alegó en su declaración que “entendió que ya la víctima tenía teléfono, que bien podía llamar ella al 112”.

Aunque la defensa alegó que la investigada tiene arraigo y familia en Navarra y no tiene antecedentes penales, la jueza asegura que “ante una posible pena tan elevada, la prisión provisional se configura como una medida útil y necesaria para evitar que la investigada pueda sustraerse de la acción de la justicia” y para “la necesaria protección a la víctima”.