Navarra cuenta con más de mil operadores de drones registrados y una cifra sin determinar de estos aparatos cuyo uso ha crecido de "forma exponencial" ya que es una herramienta "versátil" para distintas tareas, también para delinquir.

Para profundizar en el uso de los drones, la forma de combatir posibles ilegalidades y el futuro que se diseña para esta aeronaves no tripuladas, la Guardia Civil celebra este martes una jornada técnico-formativa en la que el jefe del cuerpo en la comunidad, el coronel José Santiago Martín, ha precisado que los operadores registrados oficialmente eran el año pasado 1.027 ya que son aparatos con "una expansión a la que Navarra no es ajena".

Y ha añadido, tras recordar los espacios que tienen limitaciones a su uso, que el uso de drones es cada vez más intensivo también por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad a pesar de que este es "un momento incipiente" y por lo tanto hay que buscar su desarrollo "en un entorno seguro" en lo legal, económico, físico o cibernético.

En este mismo sentido, el sargento Eduardo Rodríguez Aizpeolea, del equipo PEGASO de Navarra, ha comentado que las actuaciones de la Guardia Civil relacionadas con drones han pasado del 20-25 % en 2019 a más de un 60 % en la actualidad, a las que habría que sumar las del reto de cuerpos policiales.

"Un crecimiento exponencial y vamos a mucho más porque la normativa aeronáutica está en un proceso de evolución y apunto de que salga la nueva normativa nacional de drones que sustituirá a la de 2017", ha dicho. Se trata, ha agregado, de "un mundo complicado" en el que los operadores intentan utilizarlo bien pero no siempre con éxito ya que para ellos no es su herramienta de trabajo principal, puesto que muchos son medios de comunicación o agricultores.

Por eso ha apostado por la concienciación social aunque recordando que las multas administrativas por el uso recreativo indebido de drones puede ir desde los 40 a los 40.000 euros y si es de uso profesional la sanción sería a partir de 4.500 euros.

Rodríguez ha aludido también al uso de estos aparatos para indicar que hoy aun son reducidos pero reales en actuaciones policiales o en situaciones de rescates y emergencias, y de manera "muy incipiente" se empieza a desarrollar el reparto de paquetes o el servicio de taxi, sin olvidar nuevos usos "malintencionados" de los que también algún caso se ha detectado, como la entrega de artículos en prisión o vuelos dirigidos por personas con antecedentes cerca de instalaciones policiales.

"La amenaza del dron es algo real" porque "es muy fácil de usar" y además es una "amenaza que se ha acelerado del todo con la guerra de Ucrania", ha afirmado el sargento Josef Fares Martín de la Grupos Acción Rápida, quien ha recordado que ya el año pasado se detuvo a un yihadista en Barcelona con un dron con explosivos para atentar contra un partido de fútbol.

Para velar por la seguridad y combatir la amenaza el GAR puede estar presente tanto en el Rocío como en Sanfermines si se les requiere, sin embargo encuentra dificultades porque necesitan para su labor, además de efectivos humanos, tecnologías que resultan caras y que en poco tiempo quedan anticuadas.

Por su parte la fiscal Cruz García ha comentado que el uso ilegal de drones, acogido al Código Penal ya que no existe una normativa específica, abarca desde una conducción irregular al trasporte de armas, drogas, sustancias tóxicas o peligrosas, la comisión de daños en infraestructuras o al medioambiente y los delitos contra la intimidad y la propia imagen.

Por último, "tirando de imaginación", ha añadido, se pueden cometer con ellos delitos de coacción y acoso, pornografía infantil, descubrimiento y revelación de secretos, espionaje, robos y daños al patrimonio e incluso caza furtiva.

En el lado positivo García ha destacado la utilidad de los drones en investigaciones, vigilancias y verificación del estado de lugares, para lo que en distintas circunstancias será necesaria la autorización judicial.