La Guardia Civil de Navarra ha desmantelado un negocio ilegal de venta de comida en un almacén de Pamplona. Los agentes han intervenido 130 kg de carne y 1682 envases de cerveza con un volumen que superaba los 620 litros. En este espacio, los autores almacenaban y cocinaban distintos tipos de productos cárnicos sin las medidas higiénicas ni sanitarias correspondientes. Las autoridades han resaltado "el riesgo que ello puede suponer para la salud de los consumidores".
Además, los agentes de la Unidad de Análisis e Investigación de Fiscal y Fronteras constataron que se estaba realizando actividad de transporte de paquetería sin tener la licencia para ello. Por último, el instituto armado localizó un total de 1177 litros de diferentes bebidas derivadas, como anís y licor de manzanas preparados para ser puestas a disposición del consumidor final, sin correspondiente marca fiscal y sin haber pasado los controles sanitarios pertinentes.
Esta operación ha tenido lugar en el marco de una serie de inspecciones realizadas por el Servicio de Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil de Navarra en establecimientos de Navarra.
Por su parte, el Servicio de Inspección de Sanidad del Ayuntamiento de Pamplona certificó que los productos cárnicos no podían ser puestos a la venta al público, por lo que se procedió a su retirada para su posterior destrucción.
Con motivo de las irregularidades detectadas, los agentes formularon nueve actas de denuncia, por incumplimientos al Real Decreto de Impuestos Especiales, por ejercer una actividad sin estar dado de alta, por vender productos desconociendo su origen, por almacenarlos en lugares inadecuados, y por la conservación inadecuada de alimentos ultracongelados.
Las multas de las denuncias por incumplimiento del Real Decreto 1165/95 de Impuestos Especiales oscilan entre 600 a 30.000 euros. Y de las demás actas de denuncia que se formularon a otros Reales Decretos y Decreto Foral, sus multas oscilan entre 150 y 6.000 euros, además de la posibilidad del cierre del establecimiento.
