La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona ha enviado a prisión provisional comunicada y sin fianza a Abdelchal A., de 28 años de edad, por haber atracado con navaja a un joven de 31 años en la tarde noche del lunes mientras la víctima sacaba dinero de un cajero en el barrio de la Rochapea de Pamplona. No consiguió ni siquiera quitarle dinero, porque no llevaba encima, sino que le robó una cadena de plata y el teléfono móvil, para a continuación darle dos minutos para que saliera corriendo mientras le ponía la navaja en forma de intimidación en el cuello.

La jueza le envía a prisión debido al riesgo de reiteración delictiva, puesto que posteriormente a dicho robo con violencia entró en un establecimiento de estética con una botella de cristal para intentar robar y de allí se marchó a una farmacia situada enfrente donde fue detenido por la Policía Municipal de Pamplona, en colaboración con una patrulla de la Policía Foral. Debido a la fuerte resistencia que opuso a su detención, gritando que iba a coger un cuchillo y que iba a haber sangre, también se le acusa de un delito de atentado, al que hay que unir el robo consumado y la tentativa de robo en los comercios. En su declaración en el juzgado, el investigado ha declarado que no recuerda nada de lo ocurrido porque según manifiesta había ingerido alcohol. También ha dicho que no trabaja y que vive en la calle por lo que la jueza quiere evitar el riesgo de fuga al mandarle a prisión, porque carece de arraigo, de domicilio fijo, trabajo y no da garantía de que se presentará en el juzgado cuando sea llamado.

El suceso ocurrió el lunes en torno a las 18.50 horas cuando el agresor se dirigió a un varón de 31 años que se encontraba sacando dinero de un cajero situado en la avenida Marcelo Celayeta de Pamplona, clavando una navaja en el teclado al tiempo que le decía que le entregara el dinero. La víctima le indicó que no tenía dinero y el detenido le puso la navaja en el costado obligándole a enseñarle la cartera para comprobar que era cierto. Sin embargo, al ver en ese momento que en un bolsillo de la cartera había una cadena de plata, se apropió de ella. Poco después le colocó una navaja en la nuca y en el cuello y le exigió el teléfono móvil bajo amenaza de cortarle el cuello, dándole dos minutos para que se marchara corriendo.

Después de dicho robo, acudió a un establecimiento de estética cercano, lo hizo con una botella de cristal en la mano en actitud agresiva, y comenzó a exigir dinero amenazando con la botella. De allí se marchó hacia la farmacia situada enfrente donde fue aprehendido por agentes de la Policía Municipal de Pamplona, que requirieron la colaboración de una patrulla de la Policía Foral. En poder del detenido se halló la cadena de plata y el móvil sustraídos al varón y la navaja empleada en la comisión de los hechos.

En el momento de llevarse a cabo la actuación policial, el agresor mantuvo una conducta violenta, negándose a cumplir las indicaciones que se le daban hasta el punto de bracear con los agentes y retorcerse para evitar la detención gritando que iba a coger un cuchillo e iba a haber sangre.