La Policía Nacional está analizando las cámaras de seguridad y el móvil del niño de 14 años fallecido el pasado fin de semana en Getafe por sobredosis y busca a la persona que le proporcionó la droga, cuyas características siguen analizando, han informado a Europa Press fuentes de la investigación.

Las pesquisas las están llevados los agentes de la Policía Judicial de Getafe y no los del Grupo de Homicidios, por lo que de momento, aunque no lo descartan, no están investigando el suceso como tal.

Los agentes tomaron ayer declaración a la madre y otros familiares de la víctima, que corroboraron la versión de que unos menores le introdujeron al fallecido una gran cantidad de droga en su bebida energética.

El chico, natural de la capital, era la primera vez que visitaba Getafe tras quedar con otros adolescentes que, tras lo sucedido, escaparon a la carrera antes de que llegaran los agentes. La familia insiste en que el niño fallecido no consumía drogas y que fue engañado por esos acompañantes.

La Policía ha hablado con los amigos o conocidos, de 13 y 16 años, con los que acudió al encuentro de Getafe la víctima. Esos chicos no habrían confirmado la versión de la familia. Tampoco otros testigos, que apuntan más a la idea de que tomó las sustancias estupefacientes voluntariamente no disueltas con la bebida energética, sino acompañadas.

En el acta policial aparece también que lo que tomó el fallecido era cocaína y no tusi o 'cocaína rosa', como primeramente se indicó. Los agentes están a la espera de los resultados toxicológicos detallados de la autopsia que confirmen esta punto y la cantidad consumida, que podría ser menor a la primeramente indicada de 2 gramos.

La necropsia preliminar determina la parada cardiorrespiratoria fruto de sobredosis de drogas como causa del óbito. Ahora, los forenses analizarán si el chico fallecido padecía alguna patología que no conocía y que hubiera facilitado el fatal desenlace.

Los agentes de la comisaría de Getafe buscan ahora a la persona que le suministró la droga mortal. Para ello, están analizando vídeos colgados en redes sociales y las cámaras de seguridad de la zona.

De momento, no han encontrado los supuestos vídeos en los que los chicos facilitadores de esta sustancia estupefaciente se mofaran o rieran de la víctima cuando se desplomó en el suelo.

Los policías también están analizando las imágenes del altar en memoria del fallecido, cerca del lugar del suceso, y otras sobre el luto en el que aparecen adolescentes con gestos con las manos, banderas azules y vestimentas propios de la banda latina de los Crips, una pandilla fundada en Los Ángeles en los años 70.