Síguenos en redes sociales:

Llevaba siete móviles robados en San Fermín y un juez le condena a no poder volver a Pamplona en ocho meses

Condenado un joven en posesión de teléfonos de alta gama, alguno envuelto en papel de aluminio para evitar su rastreo

Llevaba siete móviles robados en San Fermín y un juez le condena a no poder volver a Pamplona en ocho mesesArchivo

Un joven de 20 años ha sido condenado de conformidad por el titular del juzgado de instrucción número 4 de Pamplona, en funciones de guardia, a cuatro meses de prisión por receptación, tras ser sorprendido con siete teléfonos móviles robados, al parecer por otros, en la estación de autobuses, en plena vorágine de los Sanfermines. No será enviado a la cárcel con la condición de que no vuelva a delinquir en el plazo de 2 años.

Los hechos ocurrieron el pasado 9 de julio a las 9:15 horas, cuando una patrulla de la Policía Nacional identificó al acusado, natural de Argelia, gracias a la alerta de un perro guía especializado en detección de drogas y dinero. Entre sus pertenencias se hallaron varios móviles de alta gama, como iPhones 14 y 15 Pro, y un Poco azul, uno de ellos envuelto en papel de aluminio para evitar su rastreo. Ninguno de ellos tenía la tarjeta SIM correspondiente puesta.

Las investigaciones determinaron que al menos tres de los teléfonos habían sido sustraídos días antes en la ciudad, y que el joven los portaba con la intención de obtener un beneficio económico ilícito. Aunque no queda probado que participara directamente en los robos, la sentencia considera que A. sabía perfectamente que eran productos robados y planeaba sacarlos de Pamplona. Dos de los móviles cuya titularidad era conocida se entregaron a sus propietarios, y queda pendiente la recogida del tercero. También está pendiente la plena identificación de los titulares de los otros tres teléfonos.   

A., que cuenta con antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia, aceptó los cargos y la pena propuesta por la Fiscalía, lo que permitió la tramitación rápida del juicio y una reducción de condena. Finalmente, el juez le impuso cuatro meses de prisión, pena que ha sido suspendida durante dos años con la condición de que no vuelva a delinquir en ese plazo.

Además, se le ha impuesto la prohibición de acceder o permanecer en la ciudad de Pamplona durante ocho meses y deberá responder civilmente por los perjuicios causados.

La sentencia, que fue dictada de forma oral tras la conformidad de las partes, ya es firme, al no haber sido recurrida por ninguna de ellas.