La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Navarra ha mantenido en prisión provisional comunicada y sin fianza al militar profesional de 39 años que fue arrestado por la Policía Foral en Pamplona a finales de marzo con abundante material de pornografía infantil, que además distribuía entre menores de edad y que está también investigado por delitos como agresión sexual sobre menores de edad y exhibición de actos de carácter sexual.
El arrestado ha solicitado su salida en libertad provisional por dos veces ante el Juzgado de Instrucción 4 de la capital navarra, que fue el que investiga los hechos y que le envió a prisión, y en otras dos ocasiones ante la Audiencia. En todas ellas se ha denegado su petición, al considerarse su encarcelamiento proporcionado debido a la extrema gravedad de los hechos cometidos, al alto riesgo de fuga que presenta y de reiteración delictiva, puesto que en el curso de la causa pese a haber sido arrestado en una primera ocasión (cuando se incautaron varios dispositivos telemáticos de los que disponía para que fueran analizados), siguió contactando con otras víctimas menores para fines similares. El auto ahora dictado recuerda que "no estamos en presencia de un hecho aislado que permita excluir el riesgo de reiteración delictiva. Se pone de manifiesto que utilizaba una mecánica comisiva (del delito) continuada y compulsiva".
Alega ansiedad para salir en libertad y la Audiencia lo considera injustificado
La defensa del encausado justificó su petición de libertad provisional al alegar problemas de salud desde que se encuentra privado de forma provisional de libertad, "pero los mismos, derivados de ello, ansiedad, estrés, en modo alguno pueden amparar modificar la situación de prisión provisional, cuando concurren todos los requisitos para mantener la misma", le responde la Sala.
Las actuaciones contra el encausado se iniciaron después de que en septiembre de 2024 una chica menor de edad remitiera a través de Instagram al acusado, a requerimiento de este, vídeos de contenido sexual, que pudieron ser visualizados por la madre de la menor y que provocaron su denuncia. Además, y a través de varios perfiles en distintas redes sociales, el acusado tuvo contactos similares con otros menores y obtuvo de ellos material pornográfico que distribuyó incluso a otros menores, material que ha obtenido mediante insistencia con los menores, teniendo en su poder también ingente material pornográfico de diferente procedencia que incluye videos con relaciones sexuales entre menores".
Múltiples indicios y extrema gravedad de los archivos encontrados
Para adoptar la medida de prisión a finales de marzo, el juez tuvo en cuenta la denuncia presentada por la familia de una de las menores afectadas y las diligencias efectuadas por el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía Foral para la identificación del investigado a través de la conexión empleada (la IP de conexión de sus dispositivos) así como el resultado preliminar del análisis de sus dispositivos y la extrema gravedad de alguno de los archivos en su poder, existiendo constancia no solo del contacto con los menores sino de la obtención y distribución de videos de los mismos en los que llega a convencerles de que ejecuten sobre sí mismos actos de carácter sexual".