Una semana después del comentado episodio protagonizado por Ángel Cristo, este martes Carlos Sobera se enfrentaba a una gala de 'Supervivientes: Tierra de nadie' mucho más tranquila y relajada. Además de salvar a Gorka Ibarguren de la nominación, el programa de Telecinco disfrutó de una de las noches más románticas de la edición.
Gorka Ibarguren se reencuentra con su novia Andrea
Este martes fue para Gorka Ibarguren, tal y como el propio entrenador personal así lo afirmó, "el mejor día de mi vida". Y es que tras semanas comentando los supuestos besos “en la comisura” de la boca que Gorka habría dado a Marieta, el entrenador personal recibía la visita de su novia Andrea. La pareja del concursante viajaba hasta Honduras para mostrarle su apoyo y confianza.
Pero encontrarse no fue tarea sencilla. Gorka Ibarguren tenía que nadar hasta el islote Cayo Gallo, donde recibiría instrucciones de Carlos Sobera. Ponía rumbo hasta el islote, recorriendo casi un kilómetro de distancia y enfrentándose al mar embravecido. Una vez en el destino, el entrenador personal tenía elegir su premio entre dos recompensas: una tortilla de patatas o una carta. Una carta firmada por su familia en la que faltaba la firma de su novia, Andrea.
Escondida en un cofre a su lado le esperaba Andrea. “Esto no me lo esperaba. ¡Es el mejor día de mi vida!", afirmaba Gorka Ibarguren. “Nunca he dudado de todo lo que quiero a Andrea, ni por un segundo”, afirmaba el entrenador personal.
Además de disfrutar de un tiempo con Gorka Ibarguren, Andrea también tuvo la oportunidad de conocer a los compañeros de concurso de su novio.
Blanca Manchón recibe la visita de su pareja
Pero Gorka Ibarguren no fue el único en recibir la visita de un ser querido. Blanca Manchón también puso reencontrase con su marido Manuel. La windsurfista olímpica fue expulsada el pasado jueves y se le ofreció una oportunidad más de volver a concursar tras la vacante que dejó libre la expulsión disciplinaria de Ángel Cristo. desde entonces se encuentra en Playa Olimpo realizando misiones y sin que sus compañeros sepan nada sobre ella. Desde entonces se encuentra sola en Playa Olimpo realizando misiones y sin que sus compañeros sepan nada sobre ella.
Siguiendo las indicaciones de Carlos Sobera, Blanca Manchón se montaba en la barca dirección Playa Corintio para 'supuestamente' coger todos los recursos que pudiera en un tiempo límite y llevárselos a su playa. Lo que no se imaginaba es que allí le esperaba su marido Manuel, nada más y nada menos que, enterrado en la arena. Al verle, la deportista se abalanzó sobre él para desenterrarle y darle un fuerte abrazo.
