El Ayuntamiento de Venecia (noreste de Italia) aprobó hoy el pago de "una contribución de acceso", una especie de peaje turístico ubicado en la entrada de la ciudad, que será de 5 euros para los visitantes con el fin de desalentar el turismo diario de masas a partir de la próxima primavera.

La aprobación de esa tasa ha estado envuelta en una polémica por la que se ha llegado a interrumpir el pleno municipal en varias ocasiones ante la agitada protesta de cientos de personas reunidas en la sede del Ayuntamiento, el Ca' Farsetti, contra la medida.

Venecia, que recibe a unos 30 millones de turistas al año, se convertirá así en la primera ciudad del mundo en establecer ese "peaje", que llega después de que la Unesco declarara el pasado julio que iba a proponer la inclusión del municipio en la lista de patrimonio en peligro, ya que las medidas adoptadas por el Estado italiano para proteger a la ciudad y su laguna eran "insuficientes" y "deben ser ampliadas".