Siempre disponible, en cualquier época del año. Fresco o en conserva, protagonista de una receta de fiesta o secundario en un aperitivo. A pesar de tener parientes de más postín social, el mejillón nunca defrauda a los aficionados al buen comer. Y se puede encontrar en cualquier parte del mundo.

Pero además, el mejillón es uno de los productos del mar más beneficioso para la salud gracias a la multitud de propiedades nutricionales que aporta. Es fuente de proteínas de calidad, apenas contiene grasas, si bien destaca su contenido en omega 3, y es fuente de importantes vitaminas como la B12 o el ácido fólico, y de interesantes minerales como el yodo, el hierro, el selenio o el zinc.

Este molusco bivalvo es con mucho el producto del mar que más compran los españoles, seguido de los langostinos y el pulpo, según el último estudio de la empresa Aguinamar. Entre las conclusiones, destaca que el mejillón es percibido por el 80% de los encuestados como un superalimento y el producto del mar que más valoran por su aporte nutricional. También ayuda que su precio es de lo más razonable, al menos de momento.

Saludable

Debido a sus propiedades nutricionales, se trata del alimento perfecto para incluir en nuestra dieta a cualquier edad.

La nutricionista Yaiza Quevedo afirma que debido a sus propiedades resulta perfecto para incluirlo en la dieta de cualquier persona. Desvela los beneficios que nos aporta el mejillón en diferentes grupos de población: “Es un alimento de alta densidad nutricional, lo que quiere decir que en pocas kilocalorías nos aporta numerosos nutrientes de interés”, afirma.

Como si fuera un dispensador personal de elementos beneficiosos, para personas entre 20 y 35 años el mejillón contribuye al correcto funcionamiento del sistema nervioso gracias a su aporte de yodo. También es fuente importante de hierro, por lo que es especialmente recomendable para mujeres entre 20 y 50 años, que necesitan el doble de hierro que los hombres. Esto es aún más importante en mujeres deportistas, las cuales son más susceptibles de presentar anemia ferropénica.

Más. Para personas entre los 35 y los 50 años es indicado por ser fuente de ácido fólico, una vitamina del grupo B, que contribuye a disminuir el cansancio y la fatiga. Y a partir de los 50, su alto aporte de ácidos grasos omega 3 beneficia notablemente la salud cardiovascular y su alto contenido en selenio contribuye al correcto funcionamiento del sistema inmune.

Y, por supuesto, son de vital importancia para los más pequeños, ya que su aporte de proteínas de calidad contribuyen al desarrollo de sus huesos.

En la cocina

Son muchas las formas de aprovechar este fruto del mar en la cocina, tanto en un papel protagonista como de secundario de lujo. Aquí proponemos tres preparaciones como aperitivos y dos con salsa.

1. TIGRE

Un clásico de cualquier barra de mediodía. Este frito de mejillón es una croqueta con cáscara que ha hecho, y sigue haciendo, las delicias de todos. Esmerándose un poco con la salsa bechamel, el resultado siempre se un éxito.

Ingredientes

• Aceite de oliva virgen extra

• Sal

• 1/2 pimiento rojo

• 1/2 vaso vino blanco

• 1kg mejillones

• 2 dientes de ajo

• 3 cucharadas tomate frito

• Pan rallado

• 2 huevos

Para la bechamel

• 500g leche

• 40g aceite de oliva virgen extra

• 40g harina

• Nuez moscada

• Sal

• Pimienta

Elaboración

Los mejillones. Tras haber lavado y quitado todas la impurezas de los mejillones crudos, en una cazuela ponemos un vaso de agua y calentar hasta que hierva. En ese momento ponemos los mejillones y cocemos al vapor durante 3 minutos con la tapa puesta hasta que se abran. Vaciar la conchas y reservarlas.

Picamos fino el ajo, la cebolla y el pimiento rojo, que rehogaremos en un sartén con un poco de aceite durante 10 minutos. Añadimos los mejillones cocidos bien picados junto con el vino blanco, el caldo de los mejillones bien filtrado y el tomate frito. Que reduzca todo durante 10 minutos y reservamos mientras se prepara la salsa bechamel.

Para la bechamel, en un cazo calentamos el aceite, donde echamos toda la harina y la cocinamos bien durante 2 minutos. Agregar la leche bien fría, directamente de la nevera. Añadimos también la sal, la nuez moscada y la pimienta.

Cuando vaya espesando, agregar la mezcla de los mejillones y seguimos removiendo hasta que espese del todo. Pasar a un recipiente y tapar con papel film para que no se reseque y enfriar en la nevera. Tras al menos una hora, se va hacen bolas con la masa, se colocan en su correspondiente concha, se rebozan con pan rallado y huevo y se fríen en abundante aceite caliente.

2. MEJILLONES EN TEMPUIRA SOBRE PATATAS CHIP

Esta receta da un toque levemente oriental a un rebozo muy ligero y suave.

Ingredientes

• 2 latas de mejillones en escabeche

• 60 g harina de trigo

• 30 g maicena

• 1 yema de huevo

• 5 g de sal

• 5 g azúcar

• 200 g agua helada

Elaboración

Poner dentro de un bol grande con hielos otro bol donde haremos la tempura con harina de trigo, maizena, azúcar, sal, yema de huevo y agua. Mezclar con un tenedor pero sin batir en exceso, el batido debe quedar con grumos suaves pero con textura líquida.

En un cazo verter abundante aceite y calentar hasta los 170ºC. Sin termómetro, calculamos la temperatura echando un poco de masa, si se fríe, ya está. Rebozamos los mejillones en la tempura y los echamos al aceite dejando freír durante unos minutos. El rebozado debe quedar blanquecino.

Las patatas peladas se cortan en láminas finas y se van friendo de pocas en pocas, que queden sueltas en el aceite. Una vez bien escurridas, sobre cada una de ellas se coloca un mejillón en tempura.

3. CEVICHE DE MEJILLONES

Otro aperitivo fácil y diferente con inspiración peruana.

Ingredientes

• 1 cebolla roja

• El zumo de 3 limas

• Hojas de cilantro

• Sal

• Pimienta negra recién molida

• Jengibre molido

• 3 latas de mejillones al natural

Elaboración

Cortamos la cebolla en juliana muy fina y la ponemos en un recipiente con un poco de sal, el jengibre molido y la pimienta negra. Añadimos los mejillones al natural junto con todo su jugo, el zumo de las limas, el cilantro. Algunos dan un toque picante añadiendo aquí una guindilla picada. Se deja reposar en el frigorífico tapado con papel film.

Listo.

4. MEJILLONES A LA MARINERA

Preparación clásica en cualquier restaurante de costa.

Ingredientes:

• 300 gr de mejillones

• 2 dientes de ajo

• 1 cebolla

• 1 pimiento rojo o verde

• 1 guindilla

• 1 vaso de vino blanco

• 1 cucharada de maicena

• 2 cucharadas de tomate frito

• Aceite de oliva

• Sal

Elaboración

Picar los ajos, la cebolla el pimiento. Sofreír en una sartén con dos cucharadas de aceite. A la hora de ponerlas en la sartén, las añadimos de una en una, primero la cebolla. Cuando se haya ablandado, el ajo y poco después el pimiento. Todo a fuego suave. Cuando todo quede bien unificado, añadir el vino blanco y esperar a que se evapore el alcohol para agregar la salsa de tomate. Dejar que se guise unos minutos más.

Añadir los mejillones y esperar a que se abran. Los que pasado unos minutos sigan cerrados, quitarlos y a la basura con ellos. Mientras esperamos que se abran, disolver una cucharada de maicena en medio vaso de agua, mezcla que añadimos a la cazuela para espesar un poco la salsa.

5. MEJILLONES A LA CERVEZA

Una salsa distinta y no muy habitual por esto lares pero que en Europa es muy común.

Ingredientes:

• 500 gr de mejillones frescos

• Media lata de cerveza

• Media cebolla

• Media zanahoria (depende del tamaño)

• Apio

• Perejil picado

• 3 cucharadas de mantequilla

• Sal y pimienta

• Aceite de oliva

Elaboración

Cortar las cebollas, el apio y la zanahoria en juliana y sofreírlo todo en una cazuela con dos cucharadas de aceite. Ciando todo esté bien pochado se añaden los mejillones , la mantequilla y la cerveza, salmpimentándolo al gusto. Se tapa la cazuela que hierva unos cinco minutos, hasta que se abran.

Antes de servir se puede espolvorear por encima con perejil u otra hierba aromático suave pero con personalidad