La canciller alemana, Angela Merkel, se llevó un susto este jueves mientras visitaba el parque de las aves de Marlow, en la circunscripción de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, en el norte del país. Durante la visita al zoológico, Merkel, que portaba dos botes de néctar de miel para las aves, se vio rodeada por varias bandadas de loros, que se fueron posando por diferentes partes de su cuerpo e incluso uno se colocó sobre su cabeza. La líder alemana mantuvo la compostura forzando una sonrisa, aunque terminó soltando un grito, no se sabe si real o exagerado delante de las cámaras.

Tras 16 años al frente de la Cancillería alemana, la veterana política de la CDU apura sus últimos días al frente del Gobierno germano a la espera de las elecciones de este domingo, a las que ya no se presenta y que, según las encuestas podrían provocar que la Unión Democristiana perdiera el poder, aunque probablemente harán falta complicadas coaliciones para formar gobierno.