londres - Cada cierto tiempo sale a la luz una nueva biografía sobre Isabel II que tiende a venderse como el texto que revelará todos los secretos de la longeva y misteriosa monarca. De ahí que cada libro busque contar algo llamativo, como lo hace la última gran biografía publicada sobre la soberana, Queen of the World (Reina del Mundo). La princesa Ana, su segunda hija, relata que su madre tiene un guante de peluche, mecánico, colocado sobre una palanca de madera, que le sirve para saludar cuando va subida en un coche sin tener que mover la mano. Lo explica el diario The Daily Mail, que explica que el regalo fue una idea de unos estudiantes australianos. “Se podía ajustar el extremo de la palanca y que la mano se moviera de un lado para otro. Pensaron que sería algo atrevido, pero Su Majestad estaba encantada”, revela la princesa. Al parecer, el invento acabó en el castillo de Balmoral, la residencia escocesa de Isabel II. “Creo que no lo ha usado nunca en público, pero tengo entendido que se ha convertido en un chiste familiar recurrente”, relata Hardman, el autor del libro. Y eso que Su Majestad tiene que saludar, y mucho: tal y como cuenta esta misma obra, el yate real Britannia tiene gente contratada que se dedica a saludar desde cubierta, puesto que la tripulación se veía obligada a hacerlo cada vez que pasaba junto a gente y no podía dada su carga de trabajo.