BRASIL- El veterinario Paulo Marqueti, su amigo el entrenador de perros Adilson Tosi y su hijo Miguel salieron a dar un paseo en bicicleta, acompañados por diez perros, por Jaborandi, cerca de Sao Paulo, en Brasil. Cuando uno de los perros, Negao, que se quedó atrás para beber agua, fue atrapado por una anaconda de cuatro metros. "Cuando nos acercamos, vi que la serpiente lo envolvía y se hundía en el agua", contó Marqueti. El hombre se arrojó al agua y consiguió sacar a la orilla al perro. "No pude abrirle la boca con la mano. Tomé pedazos de madera y se los puse entre las fauces. Entonces liberó al perro", contó Adilson. Tras la batalla, que duró unos 20 minutos, el perro fue salvado y la anaconda volvió al agua. Los hombres decidieron que no sería correcto matar al reptil.