Un residente de Filadelfia (Pensilvania, EEUU) que olvidó cerrar la puerta de su casa por la noche se encontró al día siguiente con un invitado completamente inesperado: una perrita sin hogar, enferma y desnutrida que al parecer lo eligió para que fuera su nuevo dueño. Jack Jokinen y su esposa se despertaron y encontraron a la cachorra en el primer piso de su residencia. Tras revisar las cámaras de seguridad, Jokinen descubrió que en la madrugada el can simplemente se acercó a su pórtico principal y entró sin ninguna dificultad. Una media hora después, un transeúnte que notó la puerta abierta se acercó, gritó para saber si todo estaba bien adentro, y cerró. La pareja decidió adoptar a la perrita y la llamaron Suzy.