Los ciudadanos de Sri Lanka han reducido drásticamente su consumo de pescado ante la preocupación de que ese alimento pueda contagiarlos de coronavirus. Por eso el exministro de Pesca del país se comió un pez en mitad de una rueda de prensa para animar a sus conciudadanos a seguir comiendo este producto. Los consumidores del país asiático temen que el pescado pueda ser una vía de contagio del virus. Y es que el mercado central de pescado situado cerca de Colombo, la capital de Sri Lanka, se convirtió recientemente en un importante foco del virus que causó miles de infecciones en todo el país. Estos temores han provocado una notable caída en el consumo de este producto, algo que ya ha hecho saltar las alarmas del sector pesquero y a lo que ha tratado de poner remedio el exministro. Según informó el medio New York Post, decenas de miles de toneladas de pescado quedaron sin venderse debido al recelo. “La gente que trabaja en la industria pesquera no puede vender su pescado. La gente no está comiendo pescado”, denunció el político.