Kathy Blattner, con 62 años de edad, está desafiando todas las reglas de la medicina reproductiva para tener a su tercer hijo. La mujer, natural de Illinois, tendrá una bebé con los óvulos donados por su hija, quien, por cierto, también está encinta. Además, no es la primera vez que se embaraza con óvulos donados, ya que Blattner conoció a su actual esposo cuando ambos habían cumplido los 40, pero no pudieron tener bebés porque los óvulos de ella ya no eran fértiles, así que recibió unos donados por una prima y, mediante fertilización in vitro, tuvo un hijo cuando tenía casi 50 años. Hace dos años, cuando tenía 60, Sarah Utz, hija de su primer matrimonio, le donó varios óvulos. Gracias a ello Kathy tiene ahora un niño de 2 años y espera una bebé para abril, con lo que se convertirá en una de las mujeres de mayor edad en dar a luz en Estados Unidos. Para Blattner no fue fácil encontrar un médico que atendiera sus problemas de fertilidad, pues por su edad la consideraban poco apta para lograr un embarazo exitoso. Sin embargo, el doctor Sherman Silber la encontró en buen estado de salud y con los medios para hacerse cargo de un bebé, a pesar de su edad. “Las mujeres mayores, en promedio, tienden a tener bebés más seguros e inteligentes, y eso se debe a que se centran en el bebé en los primeros años de vida, cuando todo sucede”, dijo Silber, y cuestionó por qué las mujeres mayores suelen considerarse no aptas para concebir mientras los hombres mayores pueden hacerlo sin controversia hasta los 90 años. Por su parte, las pautas éticas de la Sociedad Estadounidense de Medicina Reproductiva señalaron que las mujeres mayores de 55 años no deben dar a luz, pues entraña un alto riesgo para ellas y para los bebés; además de ser más probable que los padres mayores mueran antes de que el bebé sea adulto.