Ayanna Williams es una mujer de Houston (Texas) que decidió hace 28 años no cortarse las uñas. El resultado fue que consiguió el título del Guinness World Records por las uñas más largas en ambas manos, llegando a acumular entre ambas manos 7,3 metros de uña. Pero se ha cansado ya de las limitaciones que estos apéndices le provocaban en su día a día. “Con mis movimientos, tengo que ser muy, muy cuidadosa. Por lo general, en mi mente, ya me estoy preparando para el siguiente paso que tengo que hacer para asegurarme de no lastimarme con las uñas”, explicaba la dueña de las uñas. “Estoy lista para una nueva vida. Sé que voy a extrañar mis uñas, pero ya es hora, es hora de que se vayan. Estoy casi cansada de ellas, así que es hora de que se vayan”, decía. Tuvo que ser en una clínica médica donde se las cortaran, con una sierra radial quirúrgica. Nada más cortarlas, aseguró sentir un alivio inmediato y comenzó a mover los dedos con libertad y sin peso. Ahora las uñas de Ayanna Williams se conservarán en el Museo Ripley’s Believe It or Not! en Orlando (Florida).