Un hombre británico de 57 años ha muerto tras ser devorado por un tiburón en la costa occidental de Australia, como ha informado el diario 'The Sun'. Según la versión de este medio, el hombre sufrió el ataque del escualo delante de su mujer y de sus hijos, que estaban en la orilla de la playa viendo cómo el hombre nadaba en el mar.

El día del trágico accidente, el hombre y su mujer habían salido a correr y después de la carrera, el matrimonio decidió nadar en el mar. Sin embargo, la mujer salió del agua rápidamente, ya que estaba muy fría. Ahí fue cuando sufrió el ataque del tiburón que acabó con su vida.

Cuando vieron que el animal estaba devorando al hombre de 57 años, un grupo de adolescentes alertó al resto de bañistas para que abandonaran el agua.

La playa donde sucedieron los hechos, cerrada al público mientras se producían las labores de rescate. EFE

Este domingo, la policía ha suspendido la búsqueda del varón y su mujer ha querido agradecer a todas las personas que trataron de ayudar. "Descansa en paz, Paul. Murió haciendo lo que más le gusta que es hacer ejercicio. Era un hombre y un padre maravilloso", ha comentado la viuda.

Vídeo del tiburón

Inicialmente, la policía afirmó que el ataque lo habían producido varios tiburones, pero los testigos aseguraron que fue un tiburón blanco de unos cuatro metros y medio.

Los medios han difundido desde ayer en las redes un vídeo de lo que parecen dos aletas dorsales de tiburón en la misma playa donde ocurrió el accidente.

Se trata del decimoctavo ataque de tiburones en Australia en lo que va de año, con dos víctimas mortales antes del ataque de este sábado.