BARCELONA. Carmen Bustamante Barangó, fallecida este viernes en su casa, en General Mitre (Barcelona), a los 75 años, pidió a su familia que publicase su esquela con una de las famosas caras que utilizan aplicaciones como WhatsApp. A través de una esquela publicada en El Periódico, Bustamante contó con la cara sonriente que guiña el ojo y saca la lengua para despedirse.
La ciudadana no quería ningún símbolo religioso en la comunicación de su defunción, por lo que eligió este simpático emoticono para decir adiós. En la misiva, añadió palabras de agradecimiento a todos los que la han acompañado a lo largo de su vida. Según señaló el diario catalán, Carmen dejó este mundo el pasado viernes y, por su parte, la esquela fue publicada el sábado y, días antes de fallecer, se lo dijo a su hija mediante señas debido a que era su emoji favorito.