GALDAKAO. En la celebración en Galdakao del V Encuentro Técnico sobre Personas Desaparecidas sin causa aparente, Pablo Egiluz ha reconocido que, aunque la investigación sobre la desaparición de su hijo fue cerrada en varias ocasiones, fue de nuevo reabierta por la presión social en torno a la necesidad de encontrar a su hijo.
En este sentido, ha explicado que continúa aún activa por el mismo motivo y ha recalcado que la familia "psicológicamente necesita saber" qué le ocurrió la noche de la desaparición de Hodei.
"En marzo tuvimos una llamada desde Bélgica en la que nos dijeron: '¿Pero qué queréis?' 'Encontrar a Hodei', respondimos. Y entonces nos dimos cuenta de que les estábamos tocando las narices y de que la investigación seguía viva", ha relatado.
En el encuentro, moderado por el periodista experto en desapariciones Paco Lobatón, el padre de Hodei ha reconocido que el movimiento social constituido en su municipio para mantener viva la búsqueda de Hodei le ayudó a hacer frente a su desaparición.
"Es difícil decir la medida en que palió el sentimiento de soledad e incertidumbre. Pero el que hubiera un montón de personas que nos apoyaran ha sido un colchón enorme dentro de este sufrimiento", ha recalcado.
Por su parte, Iñaki Santacruz, sociólogo de la Universidad Autónoma de Barcelona, ha explicado hoy que el movimiento social creado en Galdakao para pedir la búsqueda de Hodei Egiluz es "único" y representa "uno de los mejores ejemplos de lo que es la ciudadanía europea en sentido pleno".
Santacruz ha explicado que esta entidad está llevando a cabo un estudio sobre la implicación institucional y social que se ha viviendo en Galdakao con motivo de la desaparición de Hodei Egiluz.
Este sociólogo ha explicado que las relaciones de amistad -amigos y familiares- de los padres de Hodei, Pablo y Koro, fueron el germen de un movimiento social "único" que se creó en Galdakao para pedir que este ingeniero informático fuera encontrado y que incluso apuntó "por dónde tiene que ir la seguridad en Europa".
Este especialista ha recordado que, a este movimiento social creado en torno a los amigos y familiares de los padres de Hodei, se fue más tarde sumando "mucha gente", también del resto de Europa.
Santacruz ha explicado que los movimientos sociales constituidos a partir de relaciones de amistad son "raros" y no han sido estudiados.
En este sentido, ha destacado que este movimiento social permitió "conseguir influencias sobre las instituciones e incluso forzarlas a mantener viva la búsqueda" de Hodei.
Ibon Uribe, alcalde de Galdakao, ha explicado que, tras conocer la desaparición de Hodei, llamó por teléfono al padre de este joven y pronto todos los grupos municipales se pusieron de acuerdo en la necesidad de que tenían que ayudar a su familia.
Por su parte, el alcalde de Gasteiz, Gorka Urtaran, ha explicado que el caso de Borja Lázaro, un fotógrafo de esta ciudad desaparecido en Colombia el 8 de enero de 2014, es "similar al de Hodei", al ser también un chico joven, ingeniero informático de profesión, que se aventuró a trabajar en el extranjero.
Urtaran, que ha reconocido que se desconoce si la búsqueda de Lazaro se realiza de una forma "tan activa" como debería, ha defendido la necesidad de elaborar un protocolo de actuación que guíe a las instituciones ante los casos de desaparición, una reivindicación que ha sido compartida por el alcalde de Galdakao.
Por su parte, Koldo Ezkerra, de la agrupación Hodei Bila, creada en Galdakao para mantener viva la búsqueda de este joven, ha afirmado que el grupo seguirá ayudando a los padres de este chico "porque aún está por aclarar qué ocurrió con Hodei en la noche de su desaparición".
