Washington - Once personas fallecieron ayer y otras seis resultaron heridas durante un tiroteo en la sinagoga de la Congregación del Árbol de la Vida de Pittsburgh (Pensilvania, Estados Unidos), informaron ayer fuentes oficiales. Cuando en un principio las autoridades evitaban dar detalles sobre el número exacto de víctimas mortales y apenas se referían a “varios muertos y seis heridos, incluidos cuatro agentes de policía”, la cadena CNN, que citaba fuentes de la investigación, ya afirmaba que al menos eran 10 los fallecidos.

El director de los Servicios de Seguridad de Pittsburgh, Wendell Hissrich, informó de que el sospechoso se encontraba bajo custodia policial y que había sido trasladado a un hospital cercano para ser sometido a cuidados médicos.

La cadena de televisión NBC informó de que el detenido es Rob Bowers, de 46 años, quien accedió por la mañana al templo armado con un rifle semiautomático AR-15 y con varias pistolas, según relataron varios testigos. Algunos de los presentes señalaron que el hombre detenido gritaba: “Todos los judíos deben morir”. Según ese mismo medio, Bowers sería asiduo a la red social Gab, muy popular entre los grupos supremacistas del país, y sería conocido en las redes sociales por sus comentarios antisemitas.

El sospechoso permaneció en un principio atrincherado en el templo y abrió fuego contra los agentes y los miembros de los servicios médicos que se personaron en el lugar de los hechos.

Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consideró que este tiroteo “definitivamente” parece ser un crimen antisemita. Es algo que cuesta creer que siga pasando”, dijo el mandatario al llegar a Indianápolis (Indiana) para participar en un evento con representantes del sector agrario.

Aunque al cierre de esta edición las autoridades de EEUU no habían revelado aún la cifra de muertos, Trump avanzó que “han fallecido muchas personas y otras muchas han resultado heridas”, a la vez que señaló que según algunos profesionales que han participado en la operación policial, se trata de “una de las peores escenas de un crimen” que han visto. “Lo que ha pasado hoy es horrible. Todavía estamos aprendiendo de ello, y mucho. Definitivamente parece un delito antisemita”, insistió Trump, que avanzó que “en las próximas horas” las autoridades estadounidenses tendrán “mucha información”, en una investigación liderada por el FBI.

Por su parte, el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, también se refirió a lo ocurrido durante un evento celebrado en Las Vegas (Nevada). “Lo que ha pasado hoy (ayer para el lector) en Pittsburgh no es solo criminal, es diabólico. Un ataque contra estadounidenses inocentes y un atentado contra nuestra libertad de credo”, dijo. Pence también se refirió a los hechos como un caso de “antisemitismo”, a la vez que subrayó que este tipo de actos “deben parar”. - Efe

apuntes

Trump en Twitter. “Quienes vivan en la zona deben ponerse a cubierto. Parece que hay múltiples víctimas. Cuidado con el tirador activo. ¡Que Dios nos bendiga a todos!”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente Trump.

Pena de muerte. Trump abogó por la pena de muerte para evitar tiroteos como este. “Deberíamos trabajar en reforzar las leyes relacionadas con la pena de muerte (...). Tantos incidentes, en iglesias... (los agresores) deberían pagar con el castigo último”, declaró.

Séptimo tiroteo mortal de 2018. El tiroteo en la sinagoga de Pittsburgh es el séptimo con víctimas mortales en EEUU en 2018. El peor ataque en un lugar de culto hasta la fecha ocurrió en noviembre 2017 cuando un hombre mató a 26 personas en una iglesia de Sutherland Springs (Texas).