UAGADUGÚ. Un misionero salesiano español, además de cinco funcionarios de aduanas locales, fueron asesinados este viernes en Burkina Faso durante un supuesto ataque yihadista en la provincia de Boulgou, a 40 kilómetros de la frontera sur del país, informaron hoy fuentes de seguridad.

Los hechos sucedieron en la localidad de Nohao, próxima a Ghana, cuando un grupo de yihadistas en motocicleta atentó contra el puesto de aduanas, atrapando en el fuego cruzado al misionero Antonio César Fernández Fernández, de 72 años.

El salesiano regresaba a su comunidad en Uagadugú junto a otros dos religiosos, que sobrevivieron al ataque, tras celebrar en la capital de Togo, Lomé, una reunión de la Inspectoría Salesiana de África Occidental Francófona, informaron hoy Salesianos España.

Antonio César Fernández Fernández, nacido en Pozoblanco (Córdoba) el 7 de julio de 1946, fue misionero en diversos países de África desde 1982, siendo fundador en dicho año de la presencia salesiana en Togo, siendo su primer destino. A lo largo de su trayectoria trabajó como maestro de novicios (1988 - 1998) y ejerció, entre otras funciones, como delegado de la AFO en el Capítulo General 25 (2002). En la actualidad ejercía su ministerio en Burkina Faso. Tenía 72 años de edad y había cumplido los 55 de salesiano y los 46 de sacerdote.

Este ataque se enmarca dentro de la ola de violencia que asuela Burkina Faso desde 2015, en un contexto que ha vivido un recrudecimiento de la amenaza terrorista en las últimas semanas tras la celebración de la V Conferencia de jefes de Estado del G5 del Sahel, en la que este país asumió la presidencia rotatoria.

INVESTIGACIÓN El Gobierno ha solicitado a las autoridades de Burkina Faso que abran una investigación sobre la muerte del sacerdote y ha anunciado que el embajador de España en Mali se desplazará en breve a este país para asistir a toda la tramitación necesaria.

A través de un comunicado del Ministerio de Exteriores y Cooperación, el Ejecutivo ha expresado también "su más enérgica condena y consternación" por la muerte del religioso salesiano, que falleció este viernes en un supuesto ataque yihadista, junto a otras cinco personas, en la provincia de Boulgou, a 40 kilómetros de la frontera sur del país.

El embajador de España en Malí, acreditado también ante las autoridades de Burkina Faso, se ha puesto ya en contacto con los familiares del fallecido, de 72 años, para trasladarle el pésame y ponerse a su disposición.

Además, el Ejecutivo ha ofrecido "su entera colaboración" a las autoridades de ese país para cooperar en la aclaración de las circunstancias del asesinato del sacerdote.