lima - La crisis institucional de Perú da un nuevo giro hacia la normalidad. Mercedes Aráoz renunció el martes por la noche a la presidencia interina de Perú, cargo que le dio la oposición fujimorista y de derechas, con mayoría en el Congreso, tan solo un día antes. Con esta renuncia, Aráoz, hasta ese momento número dos del presidente, Martín Vizcarra, devuelve la legitimidad al mandatario, quien fue destituido (de manera simbólica, pues Vizcarra había disuelto antes la Cámara) por la mayoría opositora en el Congreso, y evita una dualidad de cargos en un Gobierno que se encuentra en funciones y a la espera de elecciones. La decisión de Aráoz allana el camino a las elecciones que impulsa el Gobierno y la oposición rechaza.

“Comunico mi decisión de renunciar de manera irrevocable al cargo de segunda vicepresidenta constitucional de la República” y “cumplo con declinar el encargo conferido” por el Congreso de sustituir a Vizcarra, escribió Aráoz en una carta al jefe del Legislativo, Pedro Olaechea, y que ella misma difundió en su cuenta de Twitter. Aráoz agregó en la red social que esperaba que su renuncia condujera al adelantamiento de las elecciones, una propuesta de Vizcarra formalmente rechazada por el Congreso, de mayoría opositora, pero aplaudida por la ciudadanía y el Ejército, alejando la amenaza de una crisis mayor.

comicios La destitución de Vizcarra, que elevó a Aráoz el lunes al máximo cargo político del país, fue, sin embargo, simbólica, pues el mandatario antes había disuelto el Parlamento para convocar elecciones anticipadas el próximo 26 de enero. Con este movimiento, el mandatario tiene como objetivo atajar el bloqueo institucional entre el poder legislativo y el ejecutivo en el país andino a cuenta de un pulso de poder en el Constitucional. Vizcarra presentó el lunes una iniciativa legislativa para cambiar el sistema de elección de los magistrados del más alto tribunal del país, pero la mayoría opositora en el Congreso, liderada por los fujimoristas, no la tomaron en cuenta. Era la segunda vez que los parlamentarios bloqueaban una iniciativa de ley del Gobierno por lo que, de acuerdo con el artículo 134 de la Constitución, el propio Vizcarra decidió disolver las Cortes y convocar elecciones. - D.N./Agencias