La primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, ha dicho adiós este lunes al cargo y a la Casa Blanca con un mensaje en el que ha apelado a la bondad del pueblo estadounidense, a quien ha pedido que se comporte como "una familia nacional" ante los próximos desafíos que encara el país.

"Hay que centrarse en lo que nos une para elevarnos por encima de lo que nos divide. Elegir siempre el amor sobre el odio, la paz sobre la violencia y a los demás antes que a uno mismo", ha expresado en un discurso en el que ha enfatizado "el honor" que ha supuesto para ella ostentar el cargo de primera dama.

"Juntos, como una familia nacional, podemos continuar siendo la luz de la esperanza para las generaciones futuras y continuar el legado de Estados Unidos de elevar a nuestra nación a mayores alturas, a través de nuestro espíritu de valentía, bondad y fe", ha dicho.

La primera dama, quien ha calificado como "inolvidables" los cuatro año de su marido, el presidente, Donald Trump, al frente de la Casa Blanca, ha pedido a los estadounidenses que "sean apasionados en todo lo que hagan", pero que no se amparen para ello en la violencia.

"Recuerden siempre que la violencia nunca es la respuesta y nunca estará justificada", ha recalcado, como ya hiciera hace una semana con motivo del ataque al Capitolio por parte de una turba de exaltados partidarios de su esposo.

"Ruego a las personas que detengan la violencia, que nunca hagan suposiciones en virtud del color de la piel ni usen la diferencia de ideologías políticas como base para la agresión y la crueldad. Debemos escucharnos los unos a los otros y centrarnos en lo que nos une", dijo por entonces.

En sus últimas palabras como primera dama, también han tenido cabida los trabajadores que se han desempeñado en primera línea durante la pandemia del coronavirus, así como los fallecidos a causa de la enfermedad, mientras que ha agradecido las muestras de solidaridad del pueblo estadounidense durante la crisis sanitaria.

"Lloramos por las familias que han perdido a un ser querido debido a la pandemia. Cada vida es preciosa, y les pido a todos los estadounidenses que tengan precaución y sentido común para proteger a los vulnerables, ya que ahora se están administrando millones de vacunas", ha conminado.

Aunque también ha pedido en su despedida a los estadounidenses que "aprovechen todas las oportunidades para mostrar consideración hacia las otras personas", Melania Trump ha optado, no obstante, por no acompañar a su sucesora, Jill Biden, en el tradicional paseo por la Casa Blanca, que se ha prolongado desde 1950 pese a las tensiones políticas de cada momento.

El recorrido tiene lugar mientras se produce otro acto protocolario, en este caso, en el Despacho Oval, entre los presidentes saliente y electo del que Biden no ha sido notificado, como cabría esperar después de que el todavía presidente Trump anunciara que no asistiría a la toma de posesión del líder demócrata.