- La OTAN destacó ayer su unidad frente a la conducta “agresiva” de Rusia en el extranjero y la “represión” dentro de su territorio nacional, al tiempo que insistió en la importancia de reanudar el diálogo entre la Alianza y Moscú.
“Aunque nuestra relación con Rusia sigue siendo muy difícil, nuestra reunión hoy ha demostrado un fuerte acuerdo entre aliados y con nuestros socios”, declaró el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, tras la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN en Bruselas.
“Pese a años de presión y esfuerzos para entablar un diálogo significativo, Rusia ha aumentado su comportamiento represivo y su conducta agresiva”, dijo Stoltenberg. En el ámbito interno, criticó la “opresión violenta de disidentes políticos” y resaltó que la Alianza pide “la inmediata liberación” del líder opositor Alexéi Navalni “y de otros manifestantes pacíficos que han sido arrestados”.
Por lo que al extranjero se refiere, Moscú “menoscaba y desestabiliza” a sus vecinos, incluidos Ucrania, Georgia y Moldavia, según el político nórdico, quien también acusó al Kremlin de intervenir en Bielorrusia y de intentarlo en los Balcanes Occidentales.
Asimismo, hizo referencia a la expansión militar del país en diferentes puntos del planeta, sus campañas de desinformación y propaganda, los esfuerzos por influir en elecciones, los ciberataques y el uso de armas químicas contra adversarios políticos.
“La respuesta de la OTAN a las acciones de Rusia es firme. Hemos implementado el mayor refuerzo de nuestra defensa colectiva en una generación. Nos mantendremos vigilantes y seguiremos trabajando con la UE y nuestros socios cercanos para garantizar que respondemos a las acciones de Rusia juntos”, comentó.
