- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó ayer que el ciberataque que dejó fuera de juego varios días a la mayor red de oleoductos del país provino de Rusia, aunque descartó que el Gobierno de Moscú esté detrás. El mandatario estadounidense subrayó que tienen “fuertes razones” para creer que los piratas informáticos residen en Rusia.

Destacó que su Ejecutivo ha mantenido “comunicaciones directas” con el Gobierno de Moscú para que actúe frente a los delincuentes, y que él mismo tiene intención de hablar con su homólogo ruso, Vladímir Putin, sobre la necesidad de actuar frente a los ciberataques.

“Estamos trabajando para intentar llegar a un punto donde tengamos una especie de estándar internacional para que los Gobiernos que sepan que hay actividades delictivas en su territorio actúen”, indicó Biden.

El presidente explicó que el Departamento de Justicia ha creado un grupo de trabajo dedicado a perseguir a los hackers que emplean ransomware, un programa que bloquea el acceso a la información a cambio del pago de una recompensa.