PAMPLONA. Así lo ha señalado la vicepresidenta primera y consejera de Economía, Hacienda, Industria y Empleo, Lourdes Goicoechea, en la rueda de prensa en la que ha dado a conocer el anteproyecto de Presupuestos para 2013.

Al igual que con los presupuestos, Goicoechea ha dicho que con la reforma fiscal "estamos abiertos a llegar a importantes consensos", para los que ha pedido igualmente "altura de miras" y dejar al margen los intereses partidistas.

En el texto en el que trabaja el Ejecutivo, en colaboración con un grupo de expertos, se propone además, de forma pionera, un nuevo régimen en el impuesto de sociedades e IRPF para emprendedores, así como reforzar la lucha contra el fraude y contra la economía sumergida a través de un nuevo plan.

En cuanto al IRPF, la propuesta mantiene la deducción por inversión en vivienda habitual a los contribuyentes con menor renta (base liquidable inferior a 18.000 euros o 36.000 euros si es conjunta), con un importe de deducción del 15 %, del 18 % para familias con dos hijos y del 30 % para familias numerosas.

Para todos, la base máxima anual pasa de 9.000 a 6.000 euros (de 21.000 a 13.000 para declaraciones conjuntas) y se aumenta el límite de deducción de alquiler de 900 a 1.200 euros anuales, mientras que los premios de lotería y otros sorteos tendrán un gravamen del 20 %.

En cuanto al Impuesto de Sociedades, se modifica la Reserva Especial por inversiones, y se eleva del 45 % al 60 % el porcentaje de reducción de la base imponible para las empresas cuya cifra de negocio sea inferior al millón de euros; se rebaja la dotación de la Reserva de 90.000 a 50.000 euros; y se reduce el plazo del bloqueo de los fondos propios, que pasa de cinco a tres años.

También se modifica la deducción por activos fijos nuevos, exigiéndose que el importe del conjunto de activos objeto de la inversión no sea inferior a 6.000 euros, y se reduce el límite aplicable a las deducciones por incentivos, al pasar del 35 % al 25 % la cuota líquida para los periodos impositivos que se inicien en 2013.

Igualmente, cambia la compensación de bases liquidables negativas, de forma que para cifras de negocio entre 20 y 60 millones de euros la reducción queda limitada al 60 % de la base imponible previa a la reducción, mientras que para cifras de negocio superiores a los 60 millones de euros la reducción queda limitada al 50 %.

Respecto a los emprendedores, la reforma recoge, entre otros aspectos, que no tendrán la obligación de efectuar pagos fraccionados en IRPF o IS, y que se concederá el aplazamiento de la cuota a ingresar del IRPF o IS, previa solicitud, sin aportación de garantías y sin el devengo del interés de demora.

También se podrán aplazar los pagos de IRPF de los trabajadores en las mismas condiciones y podrán solicitar la devolución de las cantidades correspondientes a la deducción por realización de actividades de I+D.

Para los inversiones, se establece una deducción del 30 % en la cuota del IRPF o del IS por las cantidades invertidas en la suscripción de acciones o de participaciones procedentes de la constitución o de la ampliación de capital de entidades que tengan la consideración de emprendedoras.

En cuanto a las medidas contra el fraude fiscal, la consejera ha citado, entre otras, el garantizar el cobro de los créditos tributarios, reforzar el papel de la Administración tributaria en procesos de delito y combatir la tenencia de bienes en paraísos fiscales o territorios de baja tributación.