pamplona - El exconsejero de Industria y expresidente de Sodena, José Javier Armendáriz, reconoció ayer que la inversión de 173 millones de euros en la compra del 1% de Iberdrola “fue una decisión de Gobierno”, que considera “estratégica” y “no especulativa”. También admitió que no hubo informes técnicos que avalasen la operación porque no se trataba de un proyecto empresarial y porque la vía fue otra, “fue una decisión política”. En concreto, en 2005 el que fuera consejero de Economía, Francisco Iribarren, envió a Armendáriz una carta en la que le instó a la compra de las acciones de la eléctrica. Una decisión tomada tras haber tenido varios contactos con “la cúpula de Iberdrola que estaba promoviendo esa apertura accionarial y contactaba con actores relevantes” explicó Armendáriz ante la comisión parlamentaria que investiga la gestión de la empresa pública Sodena.

Sobre los beneficios que Navarra obtuvo de esta compra de acciones, el expresidente de Sodena consideró que aunque “resulta presuntuoso, Gamesa en Navarra ha tenido incidencia porque la presencia de Iberdrola en esta compañía era del 20% y nos permitió estar cerca de las decisiones”. En este sentido reconoció que la entrada de José María Aracama, en su día consejero de economía de UPN y en aquel momento Director de Sodena, en el Consejo de Administración de Gamesa tuvo que ver con la operación de comprar parte de las acciones de Iberdrola. “Evidentemente sí que hubo conversaciones con Sánchez Galán para estar en Iberdrola y en Gamesa y fue un éxito poder estar en Gamesa”.

Más allá de ese supuesto beneficio para Navarra el compareciente dijo no conocer la pérdida de 19,6 millones de euros que Comptos contabilizó por la operación de venta de las acciones de la eléctrica en 2014. Pero definió la compra de las mismas como un “pastel sabroso” dentro de una operación que “fue atípica” pero “interesante”, “tuvimos la oportunidad y lo hicimos, no sé lo que hicieron otros gobiernos” y agregó que el objetivo era mantener el patrimonio y mejor si se podía tener una rentabilidad de esta inversión “estratégica” y que a su juicio fue “un éxito”.

A partir de ahí, dijo, la forma de ejecutarla “fue la que se consideró más adecuada y ajustada a la ley”, aunque Comptos la calificó de “atípica”, y destacó que no había sido decidida por Sodena aunque su consejo de administración “sí la ratificó”. Se trataba, según explicó, de comprar el 1% de Iberdrola, “acelerando” la toma de decisión planteada por el titular de Economía porque “las acciones cada día cotizaban a mas valor y retrasarnos era pagar un sobreprecio”.

Armendáriz, que comenzó su intervención advirtiendo que la comisión de investigación coloca a Sodena en una situación que no merece porque es “una historia de éxitos”, no quiso responder acerca de otros proyecto fallidos de la sociedad pública porque “no he sido convocado para eso”.