pamplona - Albert Royo, que fuera secretario general del organismo de la Generalitat Diplocat, negó en su declaración en el Tribunal Supremo como testigo en este juicio que desde dicha institución se organizara y retribuyera la presencia de observadores internacionales para el referéndum del 1-O, si bien reconoció ciertos pagos, como el de 49.531 euros en hoteles de lujo y vuelos a un grupo de “visitantes” entre el 29 de septiembre y el 2 de octubre de 2017. Sin embargo, la británica Helena Catt, exdirectora de la Comisión Electoral de Nueva Zelanda, y que lideró el equipo de una docena de expertos que permaneció en Catalunya entre el 4 de septiembre y el 6 de octubre de 2017 para hacer un informe que recogiera “con perspectiva histórica” la realidad político-social en Catalunya en esos días, sí que admitió ayer haber recibido 8.775 euros mediante trasferencia bancaria en concepto de salario.

Según la Fiscalía, el equipo cobró 114.592,50 euros a los que se sumaron 62.712 euros en gastos que fueron pagados en el mes de octubre. El grupo lo integraban politólogos y expertos en derechos humanos, administración electoral y medios de comunicación contratados por Diplocat.

No obstante, al ser interrogada por la fiscal y la abogada del Estado por aspectos concretos de su labor, como las instituciones que había visitado y las personas con las que se entrevistó durante esas fechas, Catt señaló que es muy “mala para los nombres” y que solo asistía a las reuniones que le indicaban “funcionarios de la Generalitat”, aunque el exconseller Raül Romeva se encontraba en algunas sesiones informativas..

Catt, con experiencia en este tipo de tareas, descartó en el turno de preguntas de las defensas que su trabajo durante aquellos días pueda considerarse como una misión de observación electoral. “Era un proyecto de investigación, en ningún momento se nos pidió una validación del resultado”, explicó. Asimismo, no supo concretar qué paso el 20 de septiembre. “No sé lo que ocurrió”, respondió a la fiscal Consuelo Madrigal, que también la inquirió por su experiencia concreta en la jornada del referéndum del 1-O. “Estuve casi todo el día en mi oficina coordinando la labor de otros miembros de mi equipo”, precisó la experta. - I. S. M.